donostia - El domingo, minutos antes de la once de la mañana, llegó a Bilbao tras completar en casi 36 horas los 140 kilómetros de recorrido entre Donostia y la capital vizcaina. El lunes, muy entero, caminó hasta Villabona desde Irura, donde reside. Ida y vuelta. Y el martes se limitó a llevar a cabo una suave sesión de gimnasio, más que nada porque tenía concertada una entrevista con NOTICIAS DE GIPUZKOA. Cuando quedó con este periódico, decidió posponer al miércoles la salida montañera al Aizkorri que tenía programada para la víspera. Así transcurre la vida de Jacinto Lajas, un extremeño afincado en Gipuzkoa desde hace más de medio siglo que, a sus 70 años, ha sido el corredor más veterano en completar las cuatro exigentes pruebas de la Basque Ultra Trail Series.

En total, 500 kilómetros en 120 horas, 58 minutos y 49 segundos. “El límite total para completar las pruebas era de 135 horas. Me han sobrado más de catorce”, resume sin un ápice de fanfarronería. Asegura, de hecho, que sus propósitos cuando se coloca un dorsal se alejan de lo meramente competitivo. “Lucho contra mí mismo. Voy a lo mío. Me centro en terminar y en hacerlo bien”. Lo consiguió el fin de semana. “Uno se va cansando, lógicamente. Al fin y al cabo, son 140 kilómetros. Y dos noches sin dormir. Pero aguanté sin muchos problemas”. 48 horas después de llegar a la meta instalada en Bilbao, apenas sufría unas molestias en la planta de los pies. “Es como si se te cocieran”. “Por lo demás estoy muy entero”, agrega.

compañero de fatigas Jacinto Lajas no se da importancia. Destaca incluso que un corredor de Durango pudo haberle quitado el honor de ser el participante más veterano en terminar las cuatro citas de la serie. “Tiene 71 años. Hizo la Donostia-Bilbao. Y me comentó después que no se decidió en su día porque la primera prueba, la Bilbao-Vitoria, se celebraba en febrero, en invierno, con muchas opciones de nieve”. Después, la Vitoria-Pamplona tuvo lugar en mayo. Y la Pamplona-Donostia, en agosto. Pero era la primera etapa la más susceptible de celebrarse en condiciones climatológicas adversas. “Dos semanas antes” recuerda Lajas, “reconocimos el tramo entre Orozko y Murgia, a través del Gorbea”. “Arriba tuvimos nieve hasta las rodillas... Pero después, el día de la carrera, hizo un tiempo espectacular. De los que no coincidirán con la jornada de esta carrera en décadas”.

Este iruratarra de adopción, instalado en nuestro territorio desde 1965, inició su idilio con las travesías de montaña coincidiendo con la primera edición de las XIV Horas de Tolosa, en 1984. Desde entonces, ha sido un habitual de las carreras de una disciplina a cuya evolución ha asistido como testigo de excepción. “Desde pequeñito anduve en el campo. Me encanta. Y aquí en Euskadi, con el paisaje que tenemos, está la montaña. En este entorno siempre me he comportado igual: subo a una cima, desde ahí veo otra, y quiero subirla también. Así voy enlazando kilómetros y kilómetros”, explica en lo que supone un resumen de sus entrenamientos, nada metódicos, orientados únicamente por el mero disfrute que le proporciona la práctica deportiva.

el material Quizás por esto último, porque le ven disfrutar, las reprimendas que recibe en casa no pasan de piadosas broncas. “Me dicen que ya me vale, que va siendo hora de cortar el grifo y que me quite esto de la cabeza. Pero yo defiendo que se trata de una locura sana”. Jacinto tiene tres hijos y cuatro nietos, y transmite a su familia una pasión auténtica, alejada de los materialismos que poco a poco invaden su disciplina deportiva predilecta. “No tengo Internet ni GPS. Ya sé de alguno al que estos relojitos le han llevado directo a un barranco. El que no quiera perderse, mejor que me siga a mí”, bromea Jacinto Lajas en la recta final de la entrevista, antes de responder a la pregunta el millón. ¿Y el año que viene qué? “Disputaré las pruebas del circuito vasco, y alguna otra que me llame la atención y para la que me vea capacitado”. La “locura” que no cesa.

500Un total de 500 kilómetros, recorridos en cuatro pruebas. Jacinto Lajas los ha completado en 120 horas, 58 minutos y 49 segundos. El límite global era de 135 horas, por lo que el corredor de Irura ha entrado en los controles de la organización con cierta holgura.

147 corredores tomaron la salida, y de ellos 120 alcanzaron la meta. Jacinto Lajas ocupó la 112ª posición, con un tiempo de 25h05:01.

Participaron de inicio 121 corredores. Se trata de la etapa que menos finalizadores tuvo, un total de 96. Lajas ocupó la 83ª posición, con un tiempo de conclusión de 28h23:01.

Esta cita supuso además la disputa del Campeonato de Euskal Herria de la disciplina. La iniciaron en la capital navarra 134 corredores, de los que 118 alcanzaron la meta de Donostia. Jacinto Lajas llegó en la 104ª posición, invirtiendo en completar el trazado 31h35:17.

La cita más larga y con mayor desnivel positivo (8.000 metros). Salieron 152 corredores y terminaron 117, con Lajas 105º en un tiempo de 35h55:30.