donostia - La pelota a mano profesional quiso igualarse al tenis cuando presentó el Ranking Codere del curso una vez finalizado el Parejas de Primera y con el cronómetro contando desde el Cuatro y Medio. Alrededor de seis meses antes. La cuestión consistía en acercarse a la ATP a la hora de contabilizar torneos y campeonatos. Así, el Labrit de Iruñea querrá ser el O2 de Londres, en el que caben 20.000 personas. La Bombonera. El Millennium Dome. Dos calderas.

La cancha navarra se viste de gala hoy para abrir el Masters Codere, que se acerca al Torneo de Maestros del tenis, en el que llegan los cuatro mejores de cada demarcación durante todo el curso. Hambre de excelencia. A partir de las 19.45 horas, volverá al ruedo Mikel Urrutikoetxea, delantero multiusos, navaja suiza, todoterreno. El de Zaratamo, después de un verano en el que vibró su postura desde los cuadros alegres a los largos según las necesidades de Asegarce, acentuó su camino de pelotari completísimo e indispensable en las programaciones de campanillas. El manista tuvo que suspender su segundo envite en San Mateo después de recibir un golpe en el dedo corazón de su mano mano derecha y regresará en la primera semifinal de la cita en el Olimpo. Urrutikoetxea realizó una prueba el martes, tras arrastrar problemas durante todo septiembre, y manifestó encontrarse en condiciones de sumar con Álvaro Untoria ante Iker Irribarria y Mikel Larunbe. “Estoy contento de jugar con Untoria. A ver si sumamos como pareja, nos compenetramos bien dentro de la cancha y, si damos nuestro nivel, tendremos opciones de estar en la final del sábado”, valora el puntillero de Zaratamo, quien reconoce que la novedad supone “algo positivo y bueno para la pelota”. “Se acumulan puntos durante todo el año. Oinatz ha ganado el Ranking porque ha quedado primero, ahora hay otro campeonato y habrá que ver lo que sucede. Lo han copiado del tenis y creo que puede ir bien la cosa”, desbroza Urrutikoetxea.

El dueto de Asegarce se conoce a la perfección y se encontrarán con un bloque mestizo. Iker Irribarria asegura que es el “premio a todo el año”. El zurdo de Arama formó con Larunbe en San Mateo, precisamente en sustitución de Urrutikoetxea, y fueron arrollados por unos impenitentes Olaizola II-Zabaleta (22-9). Quieren quitarse la espina. “Vendremos con muchísima ilusión y con ganas de ganar”, destaca el as guipuzcoano.

Los grandes favoritos entrarán en liza mañana. Oinatz Bengoetxea, campeón del Ranking -con una dotación económica de 6.000 euros-, mezclará con el mejor zaguero, Beñat Rezusta. El zurdo de Bergara es el guardaespaldas que más distancias marca. Es el rey del verano al haber ganado tres ferias -San Fermín, Bilbao y San Mateo- y haber sido finalista en el Torneo Bizkaia por equipos, Donostia y Lekeitio. “No lo tenemos nada fácil. La pareja Altuna-Albisu da mucho respeto, es difícil poner una combinación más fuerte que esa”, dice el guardaespaldas. Son favoritos. Manifiesta además el leitzarra que “para mí sería algo bonito ganar este primer Masters, estoy contento e ilusionado pero sé que el partido va a ser más que duro. Hay que ir a por todas”.

Jokin Altuna y Jon Ander Albisu serán un hueso duro de roer. Su unión, si bien es mixta, fue de la partida el curso pasado en San Mateo y los resultados acompañaron la apuesta guipuzcoana. Impusieron su ley en la liguilla de semifinales y alcanzaron la final. Ezkurdia y Rezusta rompieron la tendencia en una final igualadísima (22-21). El Labrit de Pamplona espera comenzar a sonar como las 20.000 gargantas del O2 en el experimento del Masters.

Las empresas quieren mantener el ritmo, los premios son jugosos para los pelotaris y la cancha arderá. Muchos alicientes. - N.G.

Hoy. El Masters Codere se descorcha hoy en el Labrit (19.45 horas). Urrutikoetxea-Untoria pugnarán con Irribarria-Larunbe.

Mañana. Los principales favoritos, Bengoetxea VI-Rezusta, se miden mañana a Altuna III-Albisu a partir de las 19.45 horas.

La final. La final está prevista para el sábado en un festival que se abre a las 17.30 horas en el Labrit. Los ganadores de cada semifinal se cruzan en busca del título y los 6.000 euros de premio.