la cocina vasca es mundialmente famosa, y de eso seguramente tengan mucha culpa la gran cantidad de recetas tradicionales y de cocina vanguardista que tienen al pescado como actor principal. Unos platos que no serían posibles sin la labor que hacen los pescadores vascos, que se encargan de recoger productos de primera calidad y de esta manera, puedan llegar a las mesas de los hogares vascos. Partiendo de la premisa de que contamos con una materia prima de la mejor calidad, los diferentes agentes del sector pesquero se han reunido con el GRUPO NOTICIAS para analizar la situación en la que se encuentra y tratar de revelar los retos a los que puede enfrentarse el sector.
La mesa redonda tuvo lugar en la Cofradía San Pedro de Bermeo, y a ella acudieron entre otros, Miren Garmendia, Secretaria de la Federación de Cofradías de Gipuzkoa, el presidente de las Cofradías de Bizkaia, Iñaki Zabaleta, del sector conservero acudió Javier Ortiz de Zarate (Director Comercial de Conservas Ortiz), como representante del Gobierno Vasco acudió el Director de Pesca y Acuicultura, Leandro Azcue, y por último, Miguel Ángel Nafarrate, Responsable Comercial Regional de Eroski, que este año ha seguido aumentando la compra de pescado descargado en los puertos de Euskadi.
En la mesa se debatió y se analizó la pesca de bajura, que es la más representativa del sector vasco, y que tiene a la anchoa y al bonito como principales valores . Todos los participantes se mostraron satisfechos por como se está llevando a cabo la gestión y extracción de la pesca de estas especies en Euskadi. Además, coincidieron en que la situación en estos momentos es buena, pero también se destacaron los retos que se deben asumir. En este sentido, se habló sobre el relevo generacional, que puede suponer un problema de cara al futuro. También de la necesidad de satisfacer las demandas de los nuevos clientes y se remarcó la necesidad imperiosa de repartir las cuotas de cada pesquería, detallando los kilos correspondientes a cada una de las distintas flotas del Estado para cada especie.
En cuanto a la campaña de la anchoa y el bonito del Cantábrico 2015, Leandro Azcue resaltó que la primera “ha sido histórica” en cuanto a cantidad en el mar y por las ventas registradas, mientras que la del bonito ha sido “buena”. Las diferentes flotas que pescan anchoa en el Estado pueden pescar 25 millones de kilos durante la temporada, y “este año en el caso de la flota vasca, se ha podido dar salida a todo lo pescado”. Para Javier Ortiz ha habido un pero, “el tamaño de la anchoa”, ya que en la industria conservera “interesa una anchoa más grande”. Desde el sector extractivo, tanto Garmendia como Zabaleta insistieron en que “se ha buscado la grande”, pero “no ha aparecido”. Azcue señaló que están estudiando la posibilidad de que “un barco pesquero pagado por el Gobierno Vasco, a modo de centinela busque esa anchoa que interesa más a todos”. Esta cuestión derivó en un tema que consideraron “vital”: El definir la cifra que corresponde a cada flota, algo que “ayudaría a que cada uno se administre su cantidad como quiera” y que ofrecería garantías “a la hora de buscar el tamaño o la zona que más te interese”, sabiendo que “nadie va a pescar tu parte”, destacaron Garmendia y Zabaleta.
retos y sostenibilidad Garmendia, quiso matizar que “más pequeña no es igual a ilegal”. En este sentido, hay que destacar que la pesca de bajura en Euskadi está siendo más responsable que nunca, así lo atestigua por ejemplo el Certificado Marine Stewardship Council (MSC) que acredita que la pesca está siendo sostenible y respetuosa con la especie en cuestión, y que en Euskadi, los barcos que pescan anchoa, ya tienen. El apoyo de EROSKI al sector es inequívoco, y es que, Nafarrate recalcó que “compramos un 14% del total de la pesca de bajura de la flota vasca”. Además, en el caso de la anchoa que ha comercializado Eroski, “casi el 100% provenía de los puertos vascos”. Sin embargo, avisó de que el consumo de pescado “se ha estancado”. En este sentido, los componentes de la mesa concluyeron que los principales retos del sector son los siguientes: “Establecer junto con la Administración Central”, como se ha explicado anteriormente, “la cuota de las pesquerías específicas para cada flota, atraer al nuevo consumidor y fomentar el relevo generacional”. En cuanto al relevo, Azcue destacó el plan Itsasoratu que pondrá en marcha el Gobierno Vasco y que pretende atraer a los jóvenes al sector de la pesca, becando tanto a nuevos alumnos(para que se embarquen en barcos) como a trabajadores del sector que necesiten formación.
Pero sin duda, uno de los retos más importantes será el de atraer a los nuevos clientes, que cada vez buscan una mayor comodidad a la hora de comprar y de cocinar. En este caso, todos estuvieron de acuerdo con lo expuesto por Nafarrate en nombre de Eroski, quien afirmó que “se deben buscar fórmulas que agilicen la compra y la forma de cocinar el pescado”, puesto que están comprobando que “los jóvenes no lo compran tanto”, y eso, “puede suponer un futuro problema”, aunque se mostraron seguros de conseguirlo, dada “la importancia de la pesca y del consumo del propio pescado en Euskadi”.
25 Millones de kilos es la cantidad de anchoa que pueden pescar los barcos que pescan esa especie en el Estado y 15 millones de bonito, de los cuales los pescadores vascos quieren definir las cantidades que les corresponderían a cada uno, ya que actualmente no está detallado. Solo hay un límite de 10.000 kilos diarios por flota, pero lo consideran “insuficiente”.
Eroski ha aumentando un 22% sus compras en pesca descargada en los puertos vascos en lo que se refiere a la pesca de bajura.
El peso de Eroski debido a las compras de pescado que realiza, se traduce en 208 puestos de trabajo inferidos en el sector de la pesca extractiva de bajura en la CAV.
En 2015 el volumen de bonito descargado en puertos vascos ha crecido un 64%, debido a la fuerte apuesta que realiza Eroski por impulsar los alimentos frescos locales de temporada.