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Por un soplo

liga san miguel Hondarribia, perjudicada por el viento, queda a 14 centésimas de Kaiku y del doblete, pero le come aún más terreno en la general a Orio, quinta en Donostia

Por un soploGorka Estrada

donostia - La Liga San Miguel llegó a Gipuzkoa y no defraudó. Un soplo, catorce centésimas, dejaron sin doblete a Hondarribia. La siempre exigente bahía de La Concha acogía la primera regata del verano en Euskadi con sol veraniego y mucha expectación. La zona del Aquarium se llenó de aficionados que disfrutaron del espectáculo de una tanda de honor no apta para personas con dolencias del corazón. Hondarribia, protagonista de la mañana tras su victoria del sábado en Pedreña, repitió una regata perfecta, pero, a veces, la excelencia no lo es todo. Los factores externos cumplen un cometido y en Donostia lo hizo con creces. Quiso jugar con las traineras más fuertes por medio del viento y dejar a la Ama Guadalupekoa con la miel en los labios.

La ACT tiene cosas que la razón no entiende. Kaiku, que en Cantabria naufragó y terminó novena, se lleva su primera bandera de la temporada unas horas después. El día menos esperado. Korta introdujo a los hombres más fuertes en la Bizkaitarra y los suyos repitieron -y aumentaron- la gesta de Urdaibai en Sanxenxo, triunfando desde la primera tanda. Los de Sestao son los vigentes campeones y eso siempre infunde respeto, pero, galones aparte, pocos creían en la victoria de la trainera vizcaina. Los verdinegros se impusieron en la manga inicial con comodidad, esperando noticias. La emoción estuvo presente en la lucha que vivieron Portugalete y San Juan. La Jarrillera levantó algo su ánimo con un completo trabajo en la bahía, aunque le costó despegar al bote rosa de su popa.

Hasta el tercer largo, los del oriotarra Joxean Olaskoa Aizperro no consiguieron escaparse de la Erreka y lograron, al final, un suculento premio en forma de tercer puesto en la general de la prueba. Con sensaciones parecidas se van de Donostia la cuadrilla de San Juan. La sexta posición anima a los pasaitarras a seguir progresando.

dichoso viento Los tiempos de la segunda tanda, donde el ganador Tirán solo pudo mejorar el crono de Pedreña, daban buena muestra de que el aumento de viento sería el rival más fuerte para las opciones de bandera de los tres gallos de la categoría. A esa tercera serie, ayer se sumó Cabo, con un premio merecido por su impecable inicio de campaña. Hondarribia, Orio y Urdaibai partieron con la certeza de que deberían hacer una regata de matrícula de honor para poder ondear el trapo. Desde el inicio, la igualdad entre los tres primeros botes de la Liga se mantuvo, no tanto la comparativa con los registros de Kaiku.

En la ciaboga exterior, tres segundos a favor de la Bizkaitarra separaban a sestaoarras y aguiluchos, cinco en algunos tramos de vuelta. Un retorno en popare que sacó a relucir el mejor nivel de Ioseba Amunarriz, patrón de Hondarribia, todo un experto en hacerse con la mejor ola. El año pasado lo demostró en la victoria de los suyos en esas mismas aguas, y ayer no fue menos. La Ama Guadalupekoa cogió la proa de la prueba y no la volvió a soltar. En la baliza de dentro, Kaiku y Hondarribia dieron el giro en el mismo segundo, dejando una segunda parte preciosa para el aficionado. De vuelta al mar, las noticias que llegaban a las tostas bidasotarras no eran buenas, puesto que volvían a perder media docena de segundos con el líder virtual y solo quedaba un largo por remar.

Quizás fuera la mejor última txanpa que se ha visto esta temporada. Kaiku había terminado con fuerza su trabajo y parecía difícil darle la vuelta a la desventaja, pero la Ama Guadalupekoa nunca se rinde y este fin de semana era su fin de semana. Se sentían fuertes y, buscando coger el máximo número de olas para surcar, fueron quitando segundos al crono final estimado hasta plantarse, a falta de 500 metros, con el mismo ritmo que los ganadores. Para el recuerdo quedarán las últimas tres paladas hondarribiarras. Se hizo el silencio y la photo finish decidió: Kaiku, campeón. Catorce centésimas.

El subidón y el bajón corrieron entonces por las venas de vencedores y desafiantes, que no vencidos. La primera bandera de Kaiku este verano ya está en el club, hecho que alivia a la competitiva entidad vizcaina. En la otra cara de la moneda, junto al aplauso unánime del respetable que se dio cita en el muelle donostiarra, el honor y la valentía de Hondarribia. Dos cualidades que, aunque no tenga forma ni reparta dinero, se la llevan en la furgoneta hacia la muga los quince remeros que se metieron ayer en el bote sagrado de la Ama Guadalupekoa: Ioseba Amunarriz, Julen Castrillon, Asier Puertas, Manex Alday, Xabier Etxebeste, Ekaitz Aznar, Aner Etxart, Gonzalo Carrión, Agoitz Irazoki, Jon Lizarralde, Garikoitz Uranga, Ander Zelaia, Iñigo Vertiz y Osertz Alday.

La líder Orio no tuvo tampoco suerte en su pelea. En esta, cara a cara, los amarillos batallaron en su tanda con Urdaibai, que fue de menos a más, y terminó por pasar a la San Nikolas en los últimos metros, aventajándole en 30 centésimas. Más igualdad imposible. El resultado de los aguiluchos deja, además, la general muy apretada, con Hondarribia pisándoles los talones a dos puntos.

San Pedro respira El primer domingo de remo en Gipuzkoa sirvió también para ver la recuperación de San Pedro. En segunda tanda, con las traineras con las que espera luchar a partir de ahora, volvió a completar una magnífica regata y confirmó la mejora visible el día anterior en Pedreña. El factor del viento también pasó factura en su manga, y solo pudo ser octavo, pero comandó su tanda durante muchos minutos y solo fue superada por Tirán, que le aventajó en dos segundos. Zierbena y Astillero, en ese orden, llegaron alejados por detrás.