Robinson y detrás, un equipo

lAS sensaciones que dejó la victoria en el derbi del pasado sábado no pudieron ser mejores en el seno del Gipuzkoa Basket. Tras la preocupante derrota encajada catorce días antes frente al Joventut, el equipo jugó bien en su visita al Palau y plantó cara al Barcelona, pero perdió, así que necesitaba un triunfo ante el Bilbao Basket en Illunbe para confirmar esa mejoría. Y lo logró con creces. No solo sumó su segundo triunfo del curso, lo que le sitúa en la zona tranquila de la tabla con un balance de 2-3, sino que jugó sus mejores minutos de la temporada. "Los mejores desde que estoy aquí", llegó a decir Sito Alonso tras el encuentro.

Jason Robinson se ha convertido sin discusión en el líder de este GBC tan mejorado en apenas un par de semanas. El alero americano hace de todo en la cancha, y casi siempre bien: mantiene a raya a sus pares, apenas comete errores y se ha destapado en la faceta anotadora. En los últimos tres encuentros ha metido 21, 26 y 18 puntos y su promedio es de 18,2, solo mejorado por dos jugadores en la ACB: Doellman y Sekulic. Está especialmente acertado desde el triple, con un promedio del 50%. Lidera desde el ejemplo y recuerda a Sergi Vidal, en el sentido de que su presencia en la cancha aporta tranquilidad y confianza a sus compañeros. Su reto será mantener esa media anotadora.

Con Robinson en un estado de forma tan bueno, el resto de la plantilla ha parecido mejorar en las dos últimas semanas y todos los jugadores que saltaron a la cancha el pasado sábado -dejando a un lado la anecdótica aparición de Motos y Assalit- aportaron cosas importantes en la victoria. Doblas sigue siendo un valor seguro y, pese a lucir menos que otros días, su labor volvió a ser clave en la zona. También los dos bases destacaron: Salgado anotó y asistió; y Neto cuajó su mejor actuación de la temporada con diferencia. Defendió a un nivel altísimo y en ataque rompió una y otra vez la defensa vizcaina. Además, condujo al equipo al triunfo en los tres últimos minutos.

El derbi sirvió también para que los cuatros se reivindicaran. Tanto Charles Ramsdell como Will Hanley estaban bajo la lupa por su flojo rendimiento en las primeras cuatro jornadas, pero frente al Bilbao Basket demostraron que pueden aportar cosas importantes. El ex del Manresa metió un triple clave en los últimos dos minutos y Hanley sumó diez puntos en el segundo cuarto aprovechando su rapidez. No despejó dudas en ataque Winchester (2/9 en triples), pero su esfuerzo en defensa merece ser destacado. También atrás brillaron dos guipuzcoanos: Olaizola y Cortaberría, este último convertido ya en uno de los pilares del entramado defensivo.