Donostia. El Gipuzkoa Basket vuelve a la carga tras su primer entrenamiento de pretemporada con las ilusiones intactas desde el kilómetro cero. Con el objetivo de mantenerse en la Liga ACB con una plantilla totalmente remodelada -únicamente siguen cuatro jugadores de la pasada campaña-, los de Sito Alonso realizaron su primera toma de contacto con el parqué de Illunbe.

A diferencia de años anteriores, el técnico madrileño cuenta desde el principio con todo su plantel, ya que no se espera ninguna incorporación de última hora. En el entrenamiento estuvieron ocho jugadores de la primera plantilla -el vizcaino Javi Salgado, los donostiarras Jon Cortaberría, Mikel Motos y Julen Olaizola, el pívot David Doblas y los fichajes Will Hanley, Charles Ramsdell y Goran Huskic- más el base Xavi Assalit, que jugará en el Iraurgi SV de Adecco Plata, club convenido. Faltaron al primer entrenamiento el creador Raúl Neto, que actualmente se encuentra con la selección brasileña y volverá a Donostia el 11 de septiembre, y el alero Jason Robinson, que se ausentó de la sesión por motivos personales.

Tras el entrenamiento, Alonso manifestó que el grupo está con "muchísima ilusión" y que ya tenía "ganas de que acabara el verano" para ponerse al mando de este proyecto. El técnico vuelve con "ilusiones renovadas" por el gran esfuerzo que ha hecho la entidad guipuzcoana "durante todo el verano para hacer un equipo compensado dentro de nuestras posibilidades". Afirmó también que "las posiciones que hemos buscado las hemos conseguido", por lo que ese aspecto "es una cosa positiva".

Durante las semanas previas a la campaña 2013-14, Sito Alonso tratará de inculcar aires nuevos que deriven en un equipo con "mucha hambre y ambición por hacer las cosas bien desde el principio". Confirmó que "es difícil cambiar de objetivo", en referencia a la permanencia, pero tratará de centrarse "en la mejora individual de los jugadores" y en "dar un buen nivel competitivo" desde el primer partido. El club carece "de presión por lo ocurrido el año pasado", aunque "hay que ser realistas porque tenemos la plantilla más barata de la categoría".

El equipo, sumado a sus nuevas

incorporaciones, tiene en mente su filosofía: "Sabemos quiénes somos, sabemos los errores y aciertos de la temporada pasada y tenemos claro que hay que hacer las cosas perfectas" para conseguir la salvación. La mezcla de juventud y veteranía que rodea el vestuario es algo positivo, ya que "todos dependen un poco de los demás para buscar la motivación".

La marea txuri-urdin siempre ha apoyado a los jugadores en los momentos buenos y no tan buenos. Es por ello que Sito Alonso se rinde a sus pies: "El aficionado dio una exhibición el año pasado, tuvo una actitud ejemplar. Es por ello que siempre estamos agradecidos".

comida de bienvenida Antes del entrenamiento en Illumbe, que se celebró a las 18.30 horas, el conjunto guipuzcoano, contando con la directiva, cuerpo técnico y jugadores, se reunió en un restaurante del barrio de Amara para celebrar la habitual comida de inicio de temporada y comenzar la preparación con buen pie.