ÁLVARO Untoria y Danel Elezkano II lucharán este sábado en el Labrit por el Manomanista de Segunda. La txapela viene con regalo añadido, ya que otorga a su propietario una plaza con los pelotaris de Primera para el siguiente curso. Un premio gordo al que ninguno quiere renunciar. Será en el tercer partido del festival que comenzará a las 16.45 horas y que retransmitirá en directo Nitro a partir de las 18.00 horas. "Una txapela es algo muy bonito, pero jugar con los de arriba es por lo que luchamos siempre. Las dos cosas son preciosas", reconoció Untoria. Elezkano II lo tenía todavía más claro: "El mayor premio es poder jugar el año que viene con los más grandes", dijo.
zaguero contra delantero Los dos pelotaris de Asegarce apartaron ayer el material para la cita. Ambos tienen claras sus bazas y ninguno se saltó el guion: pelotas vivas para el zaguero y con peso para el delantero. Las de Untoria son "más de salida en el frontis y de bote. Lo normal, lo que llevo haciendo todo el campeonato. Y él ha elegido más cortas para intentar saque-remate. Danel es un rival muy duro y luchador, pero yo seguiré con mi juego, más o menos clásico de zagueros. Dominar atrás y cuando pueda acabar el tanto con la zurda, que es lo mejor que tengo. Intentaré ganar así. No me queda otra", confesó el zaguero de Nájera.
"He venido con la intención de coger pelotas que me entrasen bien en la mano, y al mismo tiempo que no tuvieran mucha salida, para intentar jugar más adelante. Estoy a gusto con la elección, y por ese lado no habrá ninguna excusa. En el peloteo no me puedo meter porque Álvaro es más que yo, pero si intento hacer mi juego de saque y remate puedo tener mis opciones", comentó por su parte el delantero Elezkano II, acompañado en la elección de material por su padre.
caminos distintos La trayectoria de los dos jóvenes manistas lleva caminos dispares. Para Untoria será la tercera final de Segunda desde que debutara hace un par de años. En las anteriores perdió, tendencia que espera cambiar el sábado. "He preparado a conciencia esta final. Estoy con muchas ganas de que llegue ya el partido para jugar lo mejor posible e intentar ganar".
Al de Nájera, no obstante, no le pueden las urgencias de victoria: "Llevo dos años en finales, tampoco son diez. No me como mucho la cabeza ni estoy obsesionado. Quiero ganar porque es un premio precioso, pero también soy consciente de que tengo un rival muy duro que me va a poner las cosas muy difíciles. Espero que la experiencia me valga para contener un poco los nervios o en un momento dado intentar otra estrategia..., pero las finales son inesperadas".
Elezkano II, sin embargo, afronta su primera final. Debutó como profesional hace menos de un año, y tras plantarse en las semifinales del Cuatro y Medio, ahora se planta en la lucha por la txapela. Todo con 19 años. "De momento no estoy nervioso, pero según se acerque el partido creo que me iré poniendo un poco más. Pero es bueno tener ese punto de nerviosismo que te hace saber que es un partido muy importante. Quizás no esperaba llegar a la final. He preparado con mucho cariño este campeonato porque siempre me ha gustado jugar mano a mano. Las cosas me han salido muy bien y ojalá podamos dar este último paso. Me encuentro bien. Cuando estás bien de manos y con confianza las cosas salen mejor", concluyó el delantero.