Unas cuentas muy difíciles
El GBC afronta muy necesitado de victorias una durísima recta final de campeonato liguero
no imposible, pero sí muy difícil. El dramático último fin de semana, saldado con victorias del Cajasol y el Fuenlabrada y derrota propia, ha dejado al Lagun Aro GBC en una situación límite en su lucha por la salvación. A falta de seis jornadas para el final, el equipo de Sito Alonso está a dos triunfos de la salvación, una distancia difícil de remontar, y más teniendo en cuenta el calendario que le espera.
Cajasol en Illunbe, Valencia a domicilio, Blusens en casa y Gran Canaria fuera son los cuatro siguientes partidos antes de la traca final: FC Barcelona en Donostia y Real Madrid fuera. Es decir, un rival directo (Cajasol), cuatro equipos de play-off y otro que tiene serias opciones de meterse en las eliminatorias por el título (Blusens). La entidad de los rivales es alta y la necesidad del Lagun Aro grande, ya que probablemente necesitará sumar hasta cuatro victorias para mantener la categoría.
El equipo guipuzcoano está haciendo bien los deberes desde el parón de la Copa, con cinco triunfos en ocho jornadas, pero las tres victorias consecutivas del Fuenlabrada -entre ellas la conseguida en Bilbao- han roto los pronósticos y han puesto la salvación muy cara, porque los otros equipos de abajo tampoco aflojan. Cualquier cuenta, por muy exigente que sea, pasa por ganar este domingo al Cajasol. Una victoria ante el equipo de Aíto García Reneses permitiría al Lagun Aro seguir vivo y afrontar con mayor optimismo los siguientes cinco choques. Perder supondría prácticamente decir adiós a la ACB y ganar recuperando el average (73-57 en contra en la primera vuelta), en cambio, dar un paso de gigante hacia la permanencia, ya que el Cajasol quedaría a un único triunfo con el average favorable. Ganar por más de 16 a los sevillanos se antoja muy complicado, pero tampoco es descabellado teniendo en cuenta el buen nivel que ha ofrecido el Lagun Aro últimamente en Illunbe, donde suma cuatro triunfos consecutivos.
A partir de ahí, parece obligatorio alcanzar las doce victorias -quizás con once valdría si se recupera el average con el Cajasol- porque los otros equipos implicados en la zona baja tienen calendarios bastante más benignos. El Valladolid y el Murcia tienen ya once triunfos y acarician la salvación, mientras que el Cajasol y el Fuenlabrada, que además se enfrentan en la última jornada, cuentan con diez victorias en su haber. Ganar también al Blusens en Illunbe en la jornada 31 es un resultado obligatorio para mantener las opciones, así como sumar un triunfo en uno de los dos próximos desplazamientos, ambos de gran dificultad: Valencia y Gran Canaria. Si lo consigue, el Lagun Aro llegaría vivo a las dos últimas jornadas ante los dos grandes de la ACB, el Barcelona y el Real Madrid. Si los blaugranas acaban superando al Panathinaikos, el duelo sería a las puertas de la Final Four, lo que daría más opciones a los hombres de Sito, que lo tienen difícil pero aún no han dicho su última palabra.