Un desafío de peso

dEBA acogerá mañana el primer gran desafío del año en los herri kirolak. El campeón de Euskal Herria de transporte de pesas, Juan José Agirregabiria, y el senegalés Ousmane Dramé, subcampeón del torneo, tratarán de avanzar la mayor distancia posible por el frontón Aldats cargados cada uno con dos txingas de 50 kilos. En teoría, el debarra es muy superior a su adversario, y por eso Agirregabiria solo ganará si consigue completar seis plazas más que el africano, es decir, alrededor de 168 metros más. El campeón accedió a tener que vencer con esta ventaja para que el duelo "estuviera un poco igualado".

El debarra ha sido el dominador de la especialidad durante los cuatro últimos campeonatos y tiene "seis o siete" títulos. En el último torneo, disputado en septiembre en Leitza, Agirregabiria se hizo con la victoria con 22 plazas -una medida que equivale a 28 metros cada una-. Dramé, que se estrenaba en la competición, fue segundo con quince plazas.

En el desafío de mañana no habrá un límite de tiempo para cada participante. Cada oponente avanzará hasta que alguna de sus txingas toque el suelo.

Las competiciones de transporte de txingas -es decir, de pesas para la competición- no abundan y por eso Agirregabiria decidió organizar algo para seguir practicando su deporte: "Ando entrenándome todo el año y no hago ni hostias, y ya son mis últimos años. Tengo 54 años, hay que sufrir mucho en esto y estoy pensando en dejarlo ya. Ahora que estoy bien entrenado quería hacer algo, porque el año que viene no sé si voy a participar en los campeonatos y ya estoy dejando las exhibiciones. Las txapelas tampoco te hacen la ilusión que te hacían al principio. Poco a poco me estoy quitando el mono". Agirregabiria pensó en "hacer algo en Deba, en casa. Pensaba intentar completar unas cien plazas con txingas de 25 kilos, pero se quedó en nada. Hablé con Luis Mari Bengoa -de la empresa Egur Sport, que organiza eventos deportivos-, y al final pensamos en hacer esto".

ousmane dramé

Un año de experiencia

Agirregabiria, natural de Lastur y residente en Deba, tiene 54 años, lleva 34 dedicado a este deporte y trabaja en una empresa de rotulación. El campeón vasco pesa 86 kilos y medía "1,84 en la mili. Pero me he quedado pequeño". Su rival, Ousmane Dramé, "es un chico muy alto. Si ese se entrena, nos machaca pero bien". Este senegalés afincado en Bizkaia tiene 29 años, mide alrededor de 1,90 metros y pesa 100 kilos, y en la actualidad alterna los entrenamientos con la búsqueda de un trabajo y la realización de cursillos para ser electricista.

Dramé lleva unos cinco años en tierras de Euskal Herria, y se inició en los herri kirolak hace apenas doce meses de la mano de su amigo Óscar Pérez -tercero en el último campeonato vasco de txingas-. Actualmente, Dramé se entrena con el club de Getxo a las órdenes del hermano del anterior, Javi. Además de con las pesas, también compite con el yunque, el carro y en el transporte de sacos, y formó parte de la selección de Bizkaia que ganó el Campeonato de los Siete Herrialdes.

Dramé asume con naturalidad la renta que le beneficiará en el desafío. Según el senegalés, Agirregabiria "piensa que él es muy bueno. El día del Campeonato de Euskadi él hizo 22 plazas y yo solo 15. Me imagino que por eso me habrá dado seis plazas de ventaja".

El reto

"Habrá que hacer unas 25 plazas"

Para ganar el desafío, Agirregabiria tendrá que completar seis plazas más que su rival. El debarra calcula que "si no hay ninguna cosa rara, habrá que hacer de 20 plazas para arriba, y para hacer eso con txingas de 50 kilos hay que andar. Y te tienes que quedar bien, no acabar el domingo hecho un Cristo. Hay que estar preparado".

Agirregabiria incluso se atreve a hablar de "unas 25 plazas. En el Campeonato de Euskadi salí antes que él e hice 22 plazas, y luego salió él y cuando llevaba 15 lo dejó, pero yo lo veía igual de bien que al principio. No sé si vería que mi marca estaba muy lejos".

El campeón vasco lleva entrenándose "desde junio o julio con txingas de 25 kilos, haciendo dos o tres kilómetros, un día sí y otro no".

El debarra explica que "una vez que levantas las txingas, puedes estar el tiempo que quieras e ir a la velocidad que puedas, pero si la txinga toca el suelo, se para todo. Lo que cuenta no es el tiempo, sino los metros que avanzas. Primero yo haré seis plazas, y luego saldrá el otro. Los dos iremos a la vez, y a ver quién aguanta más".

Dramé, por su parte, reconoce que nunca ha sido capaz de completar más de quince plazas: "Depende la resistencia, de aguantar el dolor...". Además, hace unas semanas "estaba mejor, ahora no estoy tan bien".

El reto entre los dos contrincantes se dirimirá mañana en el frontón Aldats, a partir de las 12.00 horas, en un festival que incluirá también el enfrentamiento entre las parejas de aizkolaris formadas por Aitzol Atutxa y Ugaitz Muger-tza, por una parte, y Floren Nazabal y José Ángel Zubiaga, por otro lado.