pamplona. El rendimiento del brazo derecho de Aimar Olaizola estaba en entredicho. Hasta el goizuetarra había reconocido últimamente que tenía molestias y algo de miedo, aunque sus sensaciones eran mejores con el paso de los días. Y tanto. El delantero de Goizueta disipó ayer en el Labrit cualquier tipo de duda. Gozó con su mano diestra, con la que desarboló a Oinatz Bengoetxea en una semifinal que resolvió por la vía rápida, en poco más de media hora de juego y en menos de 150 pelotazos. Así selló su pase a la final del Manomanista de la LEP.M le enfrentará en el frontón Bizkaia de Bilbao a Juan Martínez de Irujo. El 24 de junio, salvo sorpresa mayúscula o indisposición física de alguno de sus dos protagonistas.
La derecha de Aimar Olaizola funcionó ayer a pleno rendimiento. Bastaron un puñado de pelotazos para comprobarlo. Un mal resto de Bengoetxea VI lo aprovechó el goizuetarra para poner la pelota en el séptimo cuadro del frontón, muy cerquita de la pared izquierda. Fue desde esa posición, reculando y en una posición poco recomendable, desde donde el leitzarra trató de responder al derechazo de su rival. Pero no pudo. La jugada se convirtió en el 1-0 y se repitió hasta el 5-0. Solo varió la factura de los tantos. Unas veces los acabó Aimar con la zurda. Otras con la derecha. Rematando o castigando a su rival con una pegada que evidenció que su diestra está mucho más que recuperada.
Con semejante panorama, desolador para Oinatz Bengoetxea, el leitzarra apostó por el riesgo. Pero la situación empeoró. Dos ganchos se le marcharon por debajo de la chapa y un derechazo cuando dominaba el tanto casi acaba en el techo. Sus tres errores le reportaron a Aimar una ventaja aún mayor de la que disponía (8-0) y la sangría solo cesó cuando al goizuetarra se le fue la mano con un saque y cometió una falta que tuvo una incidencia ínfima en el marcador (8-1). Y es que el menor de los hermanos Olaizola recuperó el saque en la siguiente acción tras enganchar un soberbio resto de sotamano (9-1).
A Bengoetxea VI se le escapaba el partido y la cosa fue a peor a continuación. Lejos de encontrar la solución a sus problemas, se topó con un rival que no bajó la guardia y amplió su renta hasta convertirla en escandalosa (17-1). Al leitzarra le dio Aimar de su propia medicina. El menudo delantero de Leitza había accedido a semifinales después de superar a Gonzalez, al que doblegó por 22-7 después de endosarle un parcial de salida de 18-1, pero ahora se encontraba con una situación inversa y adversa.
Bengoetxea VI maquilló el electrónico jugando con fuego. Lo hizo con un magistral dos paredes al que le dio un efecto endiablado para el que Olaizola II no encontró respuesta (17-2). Más tarde, con una tan ajustada como lejana dejada (17-3) y a continuación con un tanto de saque (17-4). Pero cuando estaba pasando a la acción, se le atragantó un gancho que echó por tierra cualquier intento de remontada. Se antojaba improbable, pero se convirtió en imposible tras un error del que ya no se repuso (18-4).
Aimar se acercó al cartón 22 con un par de tantos de saque (hasta media docena logró el goizuetarra con el disparo inicial, aunque también sacó tajada del segundo pelotazo) y su único error en toda la tarde (una apertura al ancho con la zurda que acabó en la contracancha, al margen de la falta de saque que cometió) le impidió un triunfo todavía más meteórico. Con el 20-5, Oinatz volvió a fallar. Desesperado, la única opción que le quedó fue la de doblar la rodilla y reconocer la enorme superioridad de un Aimar Olaizola que se clasificó para la que será su séptima final del Manomanista. Con Irujo, ayer espectador de lujo en la grada del Labrit, como temible rival.
Duración 36 minutos y 30 segundos.
Saques 6 de Olaizola II (tantos 10, 11, 13, 16, 19 y 20) y 1 de Bengoetxea VI (tanto 4).
Faltas de saque 1 de Olaizola II (por pasarse de la distancia, el cuadro 7).
Pelotazos 145.
Tantos en juego 10 de Olaizola II y 2 de Bengoetxea VI.
Errores 1 de Olaizola II y 6 de Bengoetxea VI.
Marcador 8-0, 8-1, 17-1, 17-4, 20-4, 20-5 y 22-5.
Incidencias Partido correspondiente a las semifinales del Manomanista de la LEP.M disputado en el frontón Labrit. Lleno, aproximadamente un millar de espectadores. De salida se cantaron posturas de 100 a 80 favorables a Olaizola II. Ejercieron de botilleros Asier Olaizola (con su hermano Aimar) y Asier García (con su primo Oinatz Bengoetxea).