Donostia.¿Satisfecho con la acogida que ha tenido el recorrido de la Vuelta?

Sí. A los medios de comunicación parece que les ha gustado, ¿no? Creo que se trata de un recorrido bonito, y ahora ya todo dependerá de los corredores, y de las ganas con las que vengan. Esperemos que, como en las dos últimas ediciones, la carrera no se decida hasta los últimos días.

Etapas cortas, nerviosas, finales espectaculares... Siendo la tercera de las grandes, no tiene mucho sentido buscar recorridos como los de Giro o Tour, ¿no?

Bueno, nosotros tampoco nos comparamos con ellos, ¿eh? Cada uno sabe en qué situación del calendario está, y confecciona su carrera en función de eso. Nosotros hemos diseñado las etapas buscando emoción y que la prueba esté siempre en juego, intentando que todos los días se produzca algo de movimiento.

¿Es la tónica de los últimos años en la Vuelta, o ve alguna diferencia?

Yo creo que sí es la tónica de las últimas ediciones. Hombre, lo que está claro es que no se puede hacer lo mismo todos los años. Este, por ejemplo, nos hemos quedado en el norte, pero en otros tocará ir a otras zonas. Ya te digo que buscamos etapas más bien cortitas, con emoción, y con algún aliciente en su tramo final: alguna subida, una carreterita estrecha, un circuito... Yo creo que la afición agradece cosas así.

El pasado 11 de enero se presentó un recorrido que comenzó a gestarse...

Pues ya durante la Vuelta del año pasado. Siempre aprovechas para ver algún final, o para intentar buscar alguna carretera que hayan asfaltado o que haya sido mejorada. Nosotros, cuando sabemos de dónde se va a salir, ya buscamos etapas interesantes para el año siguiente. Vamos enlazando recorridos y configuramos lo que es la Vuelta.

¿Casi como un puzzle, no?

Sí. Tenemos los condicionantes de dónde empiezan y terminan las etapas, y buscamos los alicientes que pueda haber en zonas cercanas.

¿Y cómo ha sido lo de este año? Llama la atención el mapa, ya que la Vuelta no baja de Madrid.

Sí, y encima salimos de Navarra, tiramos hacia el País Vasco, y a las dos semanas terminamos en Cantabria, cuando antes nos habíamos ido hasta Catalunya para hacer un traslado largo hasta Galicia. Es un recorrido complicado, pero la crisis así lo ha querido. Además, teníamos que hacer un traslado, y hemos optado por que sea lo más largo posible para cubrir las zonas que podíamos recorrer en esta Vuelta. Eso no quiere decir que no quisiéramos ir al sur, ¿eh? Me imagino que el año que viene lo tocaremos.

¿Por qué comenta lo de la crisis?

Porque los ayuntamientos y las diputaciones están como están. Para contratar finales y salidas de etapa tienen que llegar peticiones, y ahora mismo no está la cosa muy boyante.

¿Qué me dice del nuevo paso por Euskadi un año después del regreso?

La afición lo acogió con gratitud en 2011. Creo que será bonito juntar a todos los seguidores en Arrate, una cima bastante histórica dentro del ciclismo.

¿Tenían miedo en 2011 a unos posibles incidentes que finalmente resultaron mínimos?

Siempre tienes esa duda, porque la carretera es muy fácil de boicotear. Pero bueno, la gente es responsable, y puede protestar desde la cuneta, aprovechando la circunstancia pero sin interferir en lo deportivo.

Se le quedaría grabada la imagen de El Vivero en Bilbao, y la ascensión de Igor Anton...

Sí, sí, aquello fue lo más bonito. Y creo que es lo que nos interesa. Tanto a la organización, como a los ciclistas, como a la afición.

¿Esperan algo parecido en Arrate?

Ojalá. Arrate tiene una ubicación muy céntrica en Euskal Herria. En las etapas de País Vasco y Euskal Bizikleta siempre ha estado a rebosar durante los últimos años. Si El Vivero, que es una subida muy bonita, estuvo como estuvo, Arrate, con la historia que tiene...

Le pregunto por las tres etapas iniciales, en Euskal Herria. La primera, una contrarreloj por equipos con 'encierro' incluido.

Ha sido una proposición del Ayuntamiento de Pamplona. Estando allí, hacer el recorrido de los encierros de San Fermín era algo interesante para todos, y buscamos esa opción. No creo que ello suponga mucho peligro para los corredores. Sí que lo habrá, pero estarán avisados y tomarán las precauciones necesarias.

La segunda etapa tenía que terminar en Viana, y los asesores que se han buscado en Navarra querían 'caña'. Les tuvieron que para los pies, ¿no?

(Risas) Es que hay muchos (se refiere entre otros a Miguel Indurain, Txente García...) que cuando dejan el ciclismo empiezan a meter presión, porque ellos ya no están encima de la bicicleta. Pero bueno, hay que pensar en el pelotón y buscar etapas para los esprinters. Pienso que esa segunda etapa, con un primer paso por Viana y luego la llegada, es interesante tanto para la población como para los velocistas que puedan venir. Habrá gente que llegue de los Juegos Olímpicos, y esta será una forma de que puedan ir entrando un poco en la carrera.

Cuénteme qué planteaban esos asesores tan duros...

Querían salir de Pamplona, hacer un circuito y luego subir Etxauri y algún puerto de la zona. Hubo que frenarles... El ciclismo es duro, pero para que los corredores te proporcionen espectáculo a veces también conviene darles un poco de tregua. Bastantes llegadas en alto habrá después.

La tercera etapa es la que llega a Gipuzkoa. ¿Está condicionada por el hecho de tener que salir de Oyón?

No, podíamos haber salido de otro sitio. Pero bueno, las peticiones eran las que eran. El año pasado hubo una etapa que ya salió de las bodegas Faustino, y a sus responsables les gustó la experiencia.

Se entra al territorio por Aretxabaleta...

Eso es.

Pero enseguida sale la carrera a Bizkaia, por Kanpazar. ¿No tuvo la tentación de probar con Elosua o algún puerto más de las vertientes guipuzcoanas?

Sí, pero tampoco queríamos hacer una escabechina en la tercera etapa. Habrá una llegada bonita y emocionante en Arrate, y será suficiente con eso como primera cita importante para los líderes.

Ya. E introducirse en el interior de Gipuzkoa es sinónimo de...

De dureza.

En el resto del recorrido de la Vuelta hay varios finales interesantes e inéditos. ¿Qué me dice de esa explosiva subida en Jaca?

Será muy bonita y espectacular. Los líderes tendrán que dar el callo, porque los segundos que se saquen con un demarraje o con las bonificaciones pueden ser fundamentales. Es una ascensión de esas que les vienen bien a Joaquim Rodríguez, o a Alejandro Valverde.

¿El Coll de la Gallina en Andorra?

Llevábamos tiempo dándole vueltas a esa opción, pero más que nada como puerto de paso. Lo que pasa es que, para subir y bajarlo, hay cuatro kilómetros sin asfaltar, y el gobierno de Andorra no quiere hacerlo todavía. Así que solo subimos y es final de etapa. Se trata de una ascensión que escapa a lo habitual allí en Andorra, mucho más estrecha de lo que es común.

Pasamos a Galicia, y al Mirador de Ézaro...

Es otra llegada para corredores como Purito o Valverde. Ciclistas que saben colocarse y que luego aprovechan su potencia al final.

Todos temen al Cuitu Negru asturiano.

Es el paso de toda la vida de Asturias a León. Lo que pasa es que arriba, en la estación de esquí, acaban de asfaltar tres kilómetros muy duros que van a dar mucho que hablar.

Con tramos del 25%, ¿no?

No sé si tanto. Pero sí que es duro, sí.

Dos cosas más. La primera, la contrarreloj. Menos propicia para los especialistas que las de los dos últimos años, ¿no?

Sí, tiene un puertecito en la mitad. Hay que pensar que los corredores que se estarán disputando la Vuelta tampoco serán grandes contrarrelojistas. Meter una subidita anima a la gente a salir a la calzada a verlo. Y además, como te decía, a todos los corredores que estén disputando el triunfo final les beneficiará que haya una tachuela.

El segundo aspecto. La carrera regresa a la Bola del Mundo, en Navacerrada...

Sí, y esperemos que, como hace dos años, la carrera siga en juego allí.

Me lo ha dicho usted al principio, y con razón. Al final todo dependerá de los corredores, y últimamente hay muchos, incluso extranjeros, que se marcan la Vuelta como objetivo. ¿Satisfechos con esa predisposición?

Para nosotros es importante que vengan los mejores corredores de casa. Pero, al final, lo bonito es que también haya algún extranjero en la pelea final. El año pasado la gente estaba un poco desmotivada porque, cuando Purito perdió sus opciones, parecía que ningún español tenía posibilidades. Pero ahí entró Cobo, y eso nos dio mucho juego.

Otra cosa que ha comentado de pasada: las bonificaciones. Le he entendido que las mantendrán.

Sí, sí. Le dan mucho juego a la carrera, no se regalan etapas, todas se trabajan. No es bonito que dos corredores lleguen juntos a la meta y se dejen ir porque no se van a sacar tiempo el uno al otro. Es interesante que las etapas se disputen al cien por cien.

Sin esas bonificaciones, el año pasado hubiese ganado Froome, y no Cobo.

Ya, pero mira, Cobo se ganó la Vuelta a base de ataques y de moverse bien en carrera. Vino a trabajar para su líder y al final se encontró en esa situación. Y Froome, cuando atacó en el tramo final de Peña Cabarga, lo hizo también pensando en los segundos de bonificación. Y eso le da un aliciente a la carrera.