donostia. Aunque hay quien piensa que la armonía es prima del sedentarismo y hermana de la indolencia, así, en armonía, a mil leguas de las trifulcas que, no hace tanto, trasladaban al ciclismo vasco a un escenario bélico exasperante, transcurrió ayer la Asamblea General Ordinaria de la Federación Vasca. En tan solo hora y media se aprobaron todos los puntos del día, el principal, el calendario vasco de competición y su columna vertebral, la hoja de ruta amateur, que mantiene, pese a los tiempos de zozobra, la misma opulencia de siempre: habrá este año que entra 54 pruebas divididas en dos torneos, el Euskaldun (26) y el Lehendakari (28), este último reservado a los ciclistas sub'23 como ha ocurrido en 2011, además de clásicas, vueltas por etapas y campeonatos de Euskadi. Desaparece, tras solo un año de vida, el Torneo Apertura para aficionados de primer y segundo año.

La única arista de la veloz Asamblea tuvo que ver con la limitación de la edad para participar en las pruebas del Euskaldun. Fijada en 28 años esta pasada temporada, la Vasca planteó ayer una restricción hasta los 27. Se aprobó la propuesta.

Entre las novedades, puntuales y residuales, destaca la de la puntuación en los torneos Euskaldun y Lehendakari, en los que se repartirán por primera vez en la historia puntos por participar (1) y acabar la prueba (3), una medida de evidente carácter incentivador. Busca acabar con los pelotones despoblados.

La Federación estudiará estos días la creación de un Torneo de Euskal Herria de pista, con cuatro o cinco pruebas puntuables.