Si se busca un equilibrio perfecto entre la tenacidad y el amor hacia la música, la respuesta es Thomas Camille. El joven músico, originario de Perigueux (Francia), pero residente en Donostia, lleva más de 15 años perfeccionando sus técnicas en la guitarra con el objetivo de conseguir tocar su música sobre los escenarios.
Tras comenzar con el instrumento de manera autodidacta, decidió apuntarse al Conservatorio Francisco Escudero para perfeccionar su habilidad y conocimientos musicales. Así, este año espera terminar sus estudios y conseguir el diploma que otorga el centro.
La guitarra como protagonista
Sin embargo, esto no es lo más fascinante, sino que Camille nunca ha dejado de crear e improvisar hasta conseguir sacar el pasado 27 de septiembre su primer EP en solitario, en el que las guitarras suenan al ritmo de melodías que beben tanto del rock como del bossa nova y deja ver la habilidad del músico.
El EP, un mini álbum de duración media, consta de cuatro temas, de unos 3-4 minutos cada uno. Claramente la protagonista es la guitarra, acompañada de ritmos de batería y de bajo. Con el título de Colors, Camille espera transmitir diversos colores y sensaciones a los oyentes a través de los cuatro temas que lo componen.
“Mi idea es hacer como Star Wars” afirma, esperando publicarr estos temas instrumentales a modo de aperitivo para, después, sacar más composiciones incorporando la voz, “como Santana”, afirma. El disco está disponible en todas las plataformas, pero también tiene pensado sacar unos vinilos para repartir entre sus amigos y familiares.
Cuatro temas, miles de colores
Colors es un disco instrumental, que se ha inspirado en artistas como Joe Satriani, Eric Johnson o Carlos Santana, entre otros, mezclando la bossa nova con el rock and roll y aires de música disco. El primer tema, Mirrors, juega con el delay y los ecos. El segundo, Doppler Effect, se inspira en dicho efecto, intentando recrearlo a través de la música. Happiness es el título del tercer tema, que se llama así porque “es lo que sentía mientras lo componía”. El último se llama Pink debido a que es el color favorito del artista. “Si tuviera que poner un vídeo a cualquiera de esos temas serían pinturas tiradas de todos los colores, me encantaría hacer un evento en una galería de pintura”, recalca.
Estos no son los únicos temas que ha compuesto, ya que tiene una amplia variedad de melodías en la cabeza. De hecho, Doppler Effect es el tema más especial para Camille, “fue el primer tema que compuse”. La última pieza, Pink, también ha dejado al músico “muy orgulloso”, donde hay partes técnicas que dejan ver el dominio del músico con la guitarra incorporando pasajes con cierta dificultad técnica.
Thomas Camille es un auténtico fan de la improvisación y de poder crear solos cuando está tocando en grupo, momento en el que provecha para demostrar sus habilidades y manejo del instrumento, al igual que la fluidez con los acordes. A pesar de que su cabeza está en constante funcionamiento, menciona que lo más complicado fue encontrar una musicalidad o un estribillo principal con el que identificar las canciones. “Tiene que ser un discurso, no podía hacer un solo de tres minutos y medio”, recalca.
La "voz" de la guitarra
“No me gusta pensar que el disco lo van a escuchar sólo los amantes de la música”, confirma el artista, esperando no recibir el visto bueno solo por las personas que tienen conocimientos musicales y aprecian la música de “calidad”, sino que también atraiga a personas que la disfruten y aprecien más allá de su habilidad compositora, es decir, que les transmita algo.
El guitarrista tiene claros sus objetivos con el disco, “no quiero solo tocar en bares, es una propuesta artística”, con la que espera que el público disfrute de las melodías sin ser una “animación musical” y que se valore todo el trabajo realizado. A su vez, subirse a un escenario es una manera de poder expresarse, de hecho asegura que “no estoy hecho para tocar en mi habitación, quiero tocar en escenarios para poder utilizar la guitarra como una voz” que habla por él. Espera poder ver sonreír a la gente mientras toca y “transmitir emociones”.
Recorrido musical
Camille no es nuevo en el terreno de los conciertos y de la grabación, puesto que forma parte del cada vez más conocido grupo rock-indie donostiarra Impacto Vudú, con el que ha estado de gira por el Estado. No obstante, afirma que tener un proyecto en solitario es “muy diferente, soy el dueño del proyecto”, donde prima la ilusión de tener la oportunidad de sacar temas propios en las plataformas, pero también el “miedo a la recepción o no recepción del disco”.
Gracias a su trabajo y carrera profesional, Camille se ha encargado no solo de la composición, sino que también de la campaña de marketing y publicidad con la que espera hacer llegar llegar su música. Además, gracias a su influencia en Instagram y Tik Tok ha conseguido crear una comunidad con la que comparte contenido melódico, llegando a los más 18.000 seguidores.
“Sólo pretendo dar emociones a la gente, no que les gusten los temas a toda costa”, por eso también el título del disco, haciendo referencia a la diversa ola de sensaciones que se puede sentir al escuchar los temas.