Kursaal Eszena presentó ayer su programación para el primer semestre de 2024, con 16 conciertos, un plantel con “grandes artistas” y un presupuesto “ambicioso” que asciende a 1.783.000 euros, casi 300.000 euros superior al de este año. Varios son los nombres destacados que actuarán en el recinto donostiarra, entre ellos Bulego, Crystal Fighters, Belle and Sebastian o Kirill Petrenko al frente de la Gustav Mahler Jugendorchester.

Crystal Fighters será la banda encargada de abrir la próxima temporada con el concierto que ofrecerá el 14 de febrero. Ese día presentará al público guipuzcoano su quinto álbum, Light +, y volverá a exhibir su música alegre, en la que tienen cabida las raíces vascas. Sin ir más lejos, uno de los instrumentos que utiliza es la txalaparta y hace diez años tocó en las cuevas de Zugarramurdi. Su vínculo con Euskadi se confirma incluyendo Donostia en su gira, que le llevará, por ahora, a una veintena de ciudades europeas. En palabras de la propia banda, el nuevo disco es “una celebración de la vida y de la luz que hay en cada uno de nosotros y que brilla en la oscuridad”.

El 10 de marzo llegará el turno de Bulego, un concierto para el que ya no quedan entradas porque se agotaron en menos de 72 horas tras ponerse a la venta el pasado 21 de noviembre. El dato sirve para explicar el éxito de esta banda azkoitiarra, que este pasado verano, en el marco de la Semana Grande, congregó a alrededor de 15.000 personas en Sagües. Los afortunados que ya tienen su sitio en el Auditorio Kursaal disfrutarán del segundo disco de los guipuzcoanos, Aldatu aurretik.

La siguiente cita de música popular será la protagonizada por Belle and Sebastian, otro de los grandes ganchos de la programación del año que viene. La cita con la banda escocesa, una de las grandes en el panorama del indie pop, será el 13 de junio, día en el que presentará su décimo álbum, A Bit of Previous. Según dicen ellos mismos, es una de sus obras “más emocionantes”, a lo que se le añade el hecho de estar grabada en su Glasgow natal, lo que otorga a las canciones “un peculiar sentido de lugar”

La programación la cerrará –aunque estrictamente se sale del primer semestre– la canadiense Loreena McKennitt, que actuará por tercera vez en el Kursaal (llenó las dos anteriores) el 12 de julio para celebrar el 30 aniversario de The Mask and the Mirror, editado en 1994 y que es una de las creaciones más celebradas por la artista, con casi cuatro décadas de andadura a sus espaldas como un icono del universo celta.

Temporada clásica

A la oferta de música popular hay que añadir las cinco citas de música clásica, todas ellas muy atractivas. Abrirá el año el 23 y 24 de febrero la compañía donostiarra Opus Lirica, que celebrará su décimo aniversario presentando L’elisir d’amore, un titulo de Donizetti que servirá para “descubrir nuevos y consolidados artistas del panorama operístico”.

El 19 de marzo la cita será con La Cetra Baroque Orchestra, junto con Vocalconsort Basel, que presentarán La Pasión según San Juan, escrita por Bach y que cumple 300 años desde su estreno en 1724. El 28 de abril regresa al Kursaal Christian Zacharias, “un invitado habitual” de Donostia y considerado uno de los mejores pianistas del mundo. En esta ocasión hará un repaso “por alguno de los compositores que mejor han escrito para el teclado, desde piezas barrocas de Scarlatti y Couperin hasta el innovadro Poulenc, pasando por sonatas del clasicismo de Haydn y Schubert”.

La danza tendrá su protagonismo el 29 de mayo con Les Ballets de Monte-Carlo, que interpetarán un clásico del ballet, La Cenicienta. Otra fecha para tener en cuenta en las agendas será la del 5 de junio, cuando llegará al Kursaal la Gustav Mahler Jugendorchester bajo la dirección de Kirill Petrenko, batuta titular de la Filarmónica de Berlín y que debutará en el Kursaal.

En cuanto a la oferta familiar e infantil, el escenario donostiarra acogerá Goazen operara: Maitasun Elixirra, adaptación del título de Donizetti para los más pequeños (25 de febrero), y Misterioa, una producción de Euskadiko Orkestraren Musika Gela que recopila música de películas de intriga (13 de abril). Además, habrá una nueva edición de los Conciertos Escolares los días 26 y 27 de febrero.

Cabe recordar también que, aunque no figuran dentro de la nueva temporada, en navidades habrá dos importantes citas: la primera será la Netherlands Bach Society, con un programa de carácter navideño el 23 de diciembre; y la segunda tiene protagonismo local, ya que Izaro presentará su nuevo disco (cerodenero) el 3 y 4 de enero.

Eszena Kide

Aprovechando su 25 aniversario, el Centro Kursaal lanza para el año que viene Eszena Kide, un carnet gratuito que da derecho “a ventajas exclusivas vinculadas a los eventos de Kursaal Eszena: descuentos en la compra de entradas, participaciones en sorteos o acciones de meet and greet".

Además, este mismo lunes se han puesto a la venta entradas sueltas para todos los conciertos excepto los de Bulego –ya acabadas– y los de Crystal Fighters y L’elisir d’amore, que ya se pusieron a la venta con anterioridad. También están disponibles los abonos de música clásica, que incluyen cuatro espectáculos y suponen un ahorro del 20% sobre el precio de las entradas sueltas.

Presupuesto

La presentación de los conciertos del primer semestre de 2024 sirvió para hacer balance del año que acaba, cerrado con un presupuesto ligeramente superior a 1,5 millones de euros después de programarse 27 conciertos. El total de espectadores fue de 29.220 –un 19% más que el año anterior– y el porcentaje de ocupación, del 69,7%, destacando el 86,8% que presentaron las actuaciones de música popular.

De cara a 2024, Kursaal Eszena ha previsto un presupuesto de 1.783.446 euros, cifra “ambiciosa” que se debe a la “confianza” en hacer una buena taquilla con la visita de “grandes artistas” como los ya mencionados. El objetivo es llegar a ofrecer 29 conciertos a lo largo de todo el año.Una de esas citas ya confirmadas de cara al segundo semestre será la de Rozalen, que actuará el 30 de noviembre. Del presupuesto total, se espera cubrir casi la mitad (el 47%) con los ingresos en taquilla, mientras que el resto vendrá de las aportaciones públicas y privadas.