- Un año más las iniciativas culturales más destacadas de los guipuzcoanos tendrán la oportunidad de hacerse realidad. Desde una plataforma virtual para ver teatro en casa hasta la creación de varios documentales o una colección de moda inspirada en los marineros vascos se dan cita este año entre los quince proyectos seleccionados por la Diputación en el programa Piztu Meta!, a través del cual el Ente foral duplicará la cuantía económica que consigan vía crowdfunding para salir adelante.

La convocatoria de este año ha recibido un total de 28 propuestas que finalmente se ha quedado en quince, con las que la Diputación confía en impulsar la cultura del territorio tras la pandemia. "En época de crisis hay que buscar nuevas fórmulas para invertir en cultura y el matchfunding es una herramienta muy interesante para impulsar proyectos y fomentar la participación de la sociedad", apuntó ayer la directora de Cultura, Mari Jose Telleria, en la presentación de los proyectos seleccionados.

Las quince propuestas se encuentran ya disponibles en la plataforma de la Fundación Goteo, en la que cualquier persona puede dar la aportación económica que estime. Los proyectos disponen de 40 días, hasta el 7 de noviembre, para conseguir el presupuesto mínimo para seguir adelante, y otros 20 más, hasta el 27 del mismo mes, para ser considerados óptimos.

A la hora de seleccionar los trabajos de la convocatoria de este curso, la Diputación, además de los ejes principales del proyecto, ha tenido en cuenta las dificultades inherentes a la situación vivida el pasado año y este a causa de la pandemia.

Así, entre las propuestas se hallan iniciativas de diferentes ámbitos como el cinematográfico, en el que convergen la creación de un cortometraje que narra la historia de una iheslari, un documental sobre los 50 años de historia del cineclub donostiarra Kresala, otra pieza de no ficción que denuncia la violencia de género partiendo de una experiencia personal y otro largometraje documental sobre las muertes del amianto.

La música y la danza también tendrán un gran peso como demuestran el proyecto Cantando a través del muro, que recogerá la música de diferentes artistas sobre la situación del pueblo saharaui; la creación de tres videoclips en torno a la feminidad; la elaboración de un álbum que profundiza en el duelo causado por la pérdida de la vida musical anterior a la pandemia; y una iniciativa para aprender danza contemporánea desde casa.

Los trabajos se completan con una colección de moda inspirada en los marineros vascos de hace 500 años; una plataforma para disfrutar del teatro desde casa; un mapa de Donostia diseñado por y para los niños; un cuento sobre la diversidad entre los más pequeños; un display para ver efectos visuales y topografías; y un programa de talleres sobre diseño y costura.