Basada en la historia real de los propios padres del productor Jonathan Cavendish, Una razón para vivir cuenta la historia de Robin, un joven inglés, elegante y carismático, que conoce a una hermosa mujer llamada Diana Blacker y rápidamente decide casarse con ella. Lleva a su nueva esposa a Kenia, donde trabaja el la industria del té. Sin embargo, en cuestión de meses es golpeado por una poliomielitis que lo deja completamente paralizado desde el cuello hacia abajo y dependiente de un respirador artificial.
Robin quiere vivir en el mundo exterior antes que en una cama de hospital, y Diana decide ayudarlo a cumplir su deseo. Contra todos los consejos médicos, Robin abandona el hospital y se mueve en una silla de ruedas con un respirador incorporado, desarrollada por su amigo, el profesor Teddy Hall.
Con este acto inusual, Robin ya es un pionero, pero incluso va más allá: emprende una cruzada para que otras personas gravemente discapacitadas puedan acceder al tipo de movilidad que él logró conseguir para sí mismo. Confundiendo a los médicos expertos simplemente por el hecho de sobrevivir, lucha incansablemente por los derechos de los discapacitados, con su amada Diana siempre a su lado.
Una razón para vivir es una tierna historia de amor acerca de dos personas fuertes e ingeniosas cuya existencia fue sacudida por un revés devastador, pero que juntos optaron por luchar y vivir una vida llena de amor, risas y alegría.
razones personales Andy Serkis tenía sus razones personales para querer dirigir esta película: “En mi vida he estado muy vinculado al mundo de las personas con discapacidad”, afirma. “Mi madre enseñaba cuando era joven a niños discapacitados. Jonathan Cavendish había visto la película Sex & Drugs & Rock & Roll, en la que yo interpreté al cantante Ian Dury, también enfermo de polio, y le había encantado. Además, mi hermana padece de esclerosis múltiple. Está en silla de ruedas desde hace diez años y mi padre era doctor, así que crecí rodeado de muchas cuestiones médicas. Y a raíz de las alumnas de mi madre, yo ya sabía mucho de la polio, la espina bífida, la talidomida, todas esas enfermedades más antiguas”.
Serkis, un maestro en la técnica de captura de movimiento (fue Gollum en la trilogía de El Señor de los Anillos y el mono protagonista de la nueva trilogía sobre El planeta de los simios) y debutante en labores de dirección, considera que “lo extraordinario del guión, además de ser la historia de amor más increíble, es que es real y graciosa”.