madrid. La actriz Maribel Verdú, a sus casi 42 años, es objeto del libro que hoy publica la crítica de cine y escritora Nuria Vidal, una biografía en la que desgrana las anécdotas más desconocidas de una de las intérpretes más importantes del país y algunos aspectos inéditos de su vida y su trayectoria profesional, que comenzó hace 25 años.

Este volumen, publicado por Plaza y Janés que lleva como título el propio nombre de la actriz, es una "conversación" entre la autora y la protagonista. Entre las confesiones acerca de sus experiencias, sus deseos y los días más importantes de su carrera, Verdú habla de su relación con los cineastas con los que ha trabajado, aunque, según señaló ayer durante la presentación, solo se ha llevado mal con dos, y esto aparece en el libro.

Sin embargo, esta "luchadora nata" --como ella misma se define-- afirma que siempre se ha llevado bien con sus compañeros y, si no, prefiere no contar detalles y guardarlos para su intimidad. Entre los directores con los que sueña destacan Juan José Campanella (El secreto de sus ojos) y Rodrigo García (Madres e hijas).

Preguntada por su ausencia en la filmografía de Pedro Almodóvar, Verdú declara: "No soy el perfil de Almodóvar. Ha hecho muchas películas ya y no ha pensado en mí. Pero eso jamás me ha quitado el sueño".

La actriz estuvo muy cerca del sueño hollywoodiense cuando acudió a la gala de los Oscar con Belle époque, de Fernando Trueba, y El laberinto del fauno, de Guillermo del Toro, así como a los Globos de Oro con el filme Y tu mamá también, de Alfonso Cuarón. Sin embargo, afirma que aunque estaría dispuesta a permanecer varios meses para trabajar en proyectos al otro lado del Atlántico -al igual que le ha ocurrido en países como México o Chile-, "bajo ningún concepto" se trasladaría allí para vivir. "Mi felicidad personal está por encima de todo, el trabajo va después", precisa.

en el zinemaldia Uno de los últimos filmes en los que participa, Blancanieves, dirigido por el cineasta vasco Pablo Berger, ha sido preseleccionado para representar a España en los Oscar y que se estrenará en el próximo Zinemaldia.

Como actriz, ha declarado que se siente "asustada y preocupada" por la subida del IVA al 21%. "La cultura no es un lujo, es fundamental para que el país avance, para que nadie pueda interceder en las ideas de uno mismo, porque si uno tiene cultura y educación lo tiene todo", defiende.

Tras 25 años en el mundo del cine y del teatro, donde comenzó cuando apenas tenía 13, afirma que aún permanecen "el entusiasmo y la ilusión por los nuevos proyectos". En su trayectoria ha habido algunos proyectos de los que ha podido arrepentirse -"te das cuenta el primer día de rodaje"-. Pero una lección que sí ha aprendido es la importancia de la imagen: "Me corté el pelo y estuve dos años sin hacer una película. Nunca más", bromea la actriz.