MADRID. Tras el repentino aborto natural que sufrió Jessica han decidido pensárselo mejor y esperar un poco para pasar por el altar. Vestida de novia la modelo confirmaba a Europa Press que por el momento no va a pasar casarse con su novio Kiko Rivera. Y es que tras haber perdido el hijo que esperaban juntos, han optado por aplazar el enlace.

"Al final por los percances que han ido pasando, hemos decidido hacer las cosas bien, disfrutar de lo que es una celebración de una boda, notan precipitada y lo hemos dejado ahí un poco", aseguraba Jessica cuando le preguntaban por la proximidad del enlace que estaba previsto para el mes de enero. La joven no obstante añadió que de todas formas avisarían a la prensa con la nueva fecha.

La ex Miss Sevilla dejó claro que para ella esa "ilusión" de pasar por el altar junto a Kiko "sigue en pie" y que lo de adelantar la boda fue a causa de su maternidad pero tal y como están las cosas ahora, la pareja ha decidido esperar y afirma que "cuando tenga que llegar, llegará". Y es que en cosa de tan solo dos meses, los dos jóvenes pasaron de hacer público su noviazgo a anunciar su paternidad y su boda a la vez y comenta que tanto su entorno como el de su chico, les brindaron todo su apoyo en torno a la decisión.

Jessica no ha dudado en opinar sobre esa velocidad que ha llevado en su relación y confiesa: "No había esperado que las cosas hubieran pasado así la verdad. Han ido surgiendo solas pero lo que sí tengo claro es lo que yo siento por él y lo que él siente por mí entonces yo creo que pon eso pasan las cosas así de rápido". La modelo sigue muy enamorada de su chico y dispuesta a seguir hacia delante con su relación.

A la modelo se le ilumina la mirada al hablar de Kiko, a quien describe como una persona "muy cariñosa, atenta y muy casero". Bueno además reconoce que su novio le hace reír mucho y que "podemos salir los dos solos y nos lo pasamos mucho mejor".