En paralelo a la crono sub'23 de los Mundiales de Escocia, elevaba el mentón competitivo la Volta a Portugal. El arranque de la carrera era un disparo. Un prólogo de 3,6 kilómetros por las calles de Viseu. En ese escenario apresurado y de urgencias, Txomin Juaristi acarició la victoria. Hubiera sido el primer laurel del Euskaltel-Euskadi en el curso. La celebración tendrá que esperar a otra ocasión. A Juaristi, que siempre ha mostrado su mejor versión en Portugal, se le escurrió la sonrisa por dos segundos.

"Estoy triste por esos dos segundos que marcan la victoria. Pero por otra parte estoy contento. No me esperaba hacer un prólogo tan bueno porque no es mi distancia ni mi especialidad. De salida ya me he sentido bien. He estado en la silla caliente hasta que ha llegado Rafa, que era el último en salir y moralmente nos ha matado, pero en general estoy contento con lo que he hecho", expuso Juaristi.

En ese chasquido entró Rafael Reis, vencedor y primer líder de la prueba. La decepción agarró por los hombros al vizcaino, que completó el recorrido en apnea con enorme pulcritud. El triunfo parecía suyo hasta que asomó, desatado, Reis. No le alcanzó para el festejo al de Markina-Xemein.

En el último instante, Reis se interpuso entre la felicidad y Juaristi. Reis firmó 3:58 en meta, por los 4:00 exactos que había fijado Juaristi. En la toma de contacto de Viseu también ofreció un perfil fotogénico Iñigo Elosegui. El nieto de Momeñe estableció un gran registro. Fue quinto, a cinco segundos de Reis. 

Roglic se alista a Burgos

Antes de encarar la Vuelta, donde busca su cuarta victoria de la carrera, Primoz Roglic competirá durante la próxima semana en la Vuelta a Burgos (15-19 de agosto) con la idea de preparar el asalto a la carrera española. En la cita burgalesa también entrarán en escena Enric Mas, que no compite desde su caída en el Tour, y Adam Yates, que fue tercero en la pasada edición de la Grande Boucle.