El fallecimiento del profesor Santiago Dexeus este viernes, 12 de abril de 2024, a los 88 años, me permite recordar a este excelente ginecólogo catalán, con una gran proyección universal, miembro de una saga de profesionales de la medicina, con el que tuve una entrañable relación de amistad, a la vez que profesional, en el campo de las Humanidades Médicas, en San Sebastián y Azkoitia.
Joven profesor acudí a él para que participara en el curso de Humanidades Médicas que en los años 1990 organicé en la Unidad Docente de Medicina de San Sebastián.
Yo, un desconocido para él, cuando su nombre y prestigio eran casi legendarios, le llamé y tuvo el gesto generoso de venir a nuestra ciudad para participar en aquella incipiente aula de Humanidades Médicas de Donostia para hablar de lo que le pedía, no de su especialidad, sino de algo que llevaba muy dentro, la figura del buen médico, del sentido humano de la medicina y de la importancia de dar ese sello a nuestra ciencia.
Una amistad se anudó entre nosotros que permitió su presencia asidua en nuestros encuentros universitarios, tesis doctorales, siempre de fondo con su amor por el País Vasco y por lo que consideraba la clave de la medicina, la escucha atenta del enfermo y el valor de la entrega generosa.
Tanto en las aulas, como en la sede de la Bascongada, en el Palacio de Insasuti, en Azkoitia, como en el Colegio Médico, estuvo presente, atento a nuestras llamadas para participar, generosamente, en lo que se le pedía.
Luego, el tiempo ha pasado, las vidas se complican, pero su recuerdo ha permanecido. Seguro que muchos obituarios que estos días dedicarán a ensalzar su nombre, incidirán, con razón, en su vertiente pionera de la ginecología, pero más importante aún, a mi juicio, sería resaltar la figura de Dexeus como un verdadero humanista, que sufrió muchos contratiempos en la vida, pero que siempre mantuvo esa elegancia personal y fina inteligencia., buen tono, nunca displicente, y siempre y ante todo médico.
En una de sus últimas entrevistas, decía algo importante: “Hoy he leído los periódicos y hay una buenísima noticia y es que la filosofía vuelve a ser medular y troncal en la enseñanza de los jóvenes, esa es la buena noticia pues la filosofía nos abre las mentes y nos hará pensar y ser críticos, y más libres, y añado yo, más juiciosos.
Quiso mucho a este País y a sus gentes y, a la mujer sobre todo, a la que ponía en un pedestal, nosotros le deseamos toda la felicidad que se merece. Goian bego Santiago Dexeus.
Etxabe Profesor Titular Numerario de Historia de la Medicina, UPV/EHU