Tres puntualizaciones a su escrito: Primero, un cargo público no puede disolver un colectivo sin ninguna razón, y se necesita un soporte legal para poder hacerlo y le aseguro, que no elaboré ninguna norma "ad hoc" para disolverlo. Segundo, ningún cargo público de mi nivel tenía poder suficiente para impedir que la prensa actuara con independencia, y si lo cree, es que vive fuera de la realidad. Tercero, las subvenciones se canalizaban a traves de las Federaciones, como Ud. reconoce en su escrito. No me acuerdo a lo que Ud. se refiere, son 25 años al menos, pero sí de los criterios y normas con los que actué; y, el hacer normas no es politizar el deporte, sino reglarlo, y no es un hecho arbitrario, sino controlado y público, y todo ciudadano tiene derecho a recurrir si se considera afectado, y estoy seguro que Ud. no lo hizo, porque nunca tuve que asistir a un juicio iniciado por un tema subvencional. El sentido de politizar el deporte en mi artículo, se refería a la utilización del deporte para intentar influir en la identidad nacional de las personas, hecho que no creo concurriera en su caso. Me alegro que sea "hincha íntimo"de la Real, pero desearía que ampliase su "territorio"de hincha deportivo y lo fuese también de la selección de Euskadi, y así coincidiríamos, al menos, en nuestras aficiones futbolísticas.

Por último, si no le publican algún escrito, le aseguro que no será por mi culpa.