En las últimas horas se ha hecho viral un vídeo en el que se ve cómo una monja placa a un hombre en un pequeño pueblo francés, por lo inhabitual de observar a una religiosa actuando de esa manera. El sorprendente hecho tiene su explicación y se remonta a varios años atrás, concretamente a 2018, cuando la comunidad de la Familia Misionera de Notre-Dame propuso crear un centro religioso en el parque natural de los Monts d’Ardèche, en el pueblo de Saint-Pierre-de-Colombier, de menos de 400 habitantes, situado en el departamento de Ardèche, en la región de Ródano-Alpes, al sureste de Francia.

Un centro que contará con una iglesia con capacidad para 3.500 personas y 50 metros de altura y con un gran parking para autobuses, con la esperanza de recibir a numerosos peregrinos, algo que supone una aberración para diferentes grupos ecologistas, que pretenden salvaguardar la identidad de un parque natural que cuenta con una planta protegida, la mignonette de Jacquin. Las movilizaciones que se llevaron a cabo consiguieron que en 2020 se paralizara su construcción por la presentación de unos informes que analizaban su impacto en el medio ambiente, pero en 2022 se logró la aprobación definitiva del proyecto y se reanudaron las obras.

Eso no impidió que las protestas continuaran, y en las últimas semanas se han recrudecido. El momento de mayor tensión llegó este lunes, cuando unos activistas del grupo Les Amis de la Bourges, que luchan en favor del medio ambiente, acudieron al lugar de las obras en torno a las 8 de la mañana con la intención de detenerlas. Pero las monjas estaban avisadas de su llegada y se personaron desde la madrugada allí para hacer frente a los activistas.

Y vaya si lo hicieron. En un vídeo publicado por el periodista de la televisión francesa F3 Rhone-Alpes Léo Chapuis se observa cómo un ecologista se dispone a entrar en la zona de obras y aparece una monja para realizarle un auténtico placaje que acaba con los dos en el suelo, aunque sin resultar heridos.