El cuidado de la piel es fundamental para la salud y nuestra imagen. Más allá de protegerse del sol o aplicar limpiadores naturales antes de acostarnos, existen una serie de hábitos que debemos tener en cuenta.
Muchos optan por utilizar sérums, exfoliantes o cremas hidratantes, pero es importante escuchar los consejos de los dermatólogos para cuidar nuestro rostro de forma adecuada.
El dermatólogo Alex Docampo, especialista en dermatología y venereología, detalla cinco aspectos importantes para cuidar la piel: "Jamás le hagas esto a tu piel. 5 errores de skincare y cremas de cuidado facial que pueden aumentar las arrugas, manchas, y envejecer tu cutis mucho antes de lo debido, además de no curar los granos de acné o rosácea".
En primer lugar, explica que no se debe abusar de las cremas hidratantes: "No va a eliminar las arrugas a largo plazo y puede facilitar que crezca el ácaro demodex, que produce sensibilidad facial".
Otro error habitual es confiar en cremas antiarrugas caras sin principios activos: "Solo tienen compuestos exóticos como flores, caviar... pero ningún principio activo realmente efectivo para transformar la piel como sería el retinol".
Asimismo, ponerse moreno a propósito es muy negativo pala la piel. Aunque el sol tiene evidentes beneficios para la salud, "ir a la playa a ponerse moreno a propósito solo consigue estropear nuestra piel a largo plazo: arrugarla y aumentar el riesgo de cáncer cutáneo", señala.
El uso del limón para limpiar las manchas de la piel también es un error habitual. Además de no conseguir eliminarlas, el contacto con el sol puede empeorarlas.
Por ultimo, Docampo explica que ante casos de acné o rosácea hay que acudir al dermatólogo. "Es imposible que se curen con cremas de venta libre".
La importancia de cuidarse el rostro
Mantener el rostro sano y bien cuidado no solo contribuye a una buena imagen, sino también a nuestra salud y bienestar general.
Cuidar la piel del rostro va más allá de la estética. La piel facial está constantemente expuesta a agresiones externas como la radiación solar, la contaminación, el frío, el viento y el uso de productos inadecuados.
Sin la protección y limpieza adecuadas, estos factores pueden acelerar el envejecimiento, provocar manchas, deshidratación o incluso afecciones como el acné, la rosácea o la dermatitis.
Una rutina básica de cuidado facial —que incluya limpieza, hidratación y protección solar— puede marcar una gran diferencia a largo plazo.
Limpieza del rostro
Limpiar el rostro ayuda a eliminar impurezas y exceso de grasa; hidratarlo mantiene la piel elástica y protegida; y usar protector solar previene el daño causado por los rayos UV, principal causa del envejecimiento prematuro.
Además, cuidarse el rostro es también un acto de autocuidado que mejora la autoestima. Dedicarse unos minutos al día para mimarse puede tener efectos positivos en la salud mental, fomentando una mejor relación con uno mismo.
Beneficios visibles
En resumen, cuidar el rostro es una inversión diaria que impacta tanto en la imagen exterior como en el bienestar emocional y la salud a largo plazo. Incorporar hábitos simples pero constantes puede generar beneficios duraderos y visibles.