ESTADOS UNIDOS Irving (18), Curry (13), Harden (16), Faried (9) y Davis (8) -quinteto inicial-; Thompson (16), Rose (4), Gay (3), Derozan, Plumlee (2), Cousins (7) y Drummond.

LITUANIA Juskevicius (12), Seibutis (3), Maciulis (2), Motiejunas (2) y Valanciunas (15) -quinteto inicial-; Pocius (10), Kuzminskas (15), Darjus Lavrinovic (9), Jasaitis, Ksistof Lavrinovic, Jankunas y Vasilauskas.

Parciales 21-16; 22-19; 33-14; y 20-19.

Árbitros José Reyes (MEX), Sreten Radovic (CRO) y Matej Boltauzer (SLO). Eliminaron por cinco faltas personales a Davis (min.34) y Cousins (min.37).

Pabellón Palau Sant Jordi de Barcelona. 15.070 espectadores.

Barcelona - Un parcial de 10-0 al inicio de la segunda parte certificó el pase de Estados Unidos a la final del Mundial con una contundente victoria sobre Lituania (96-68), que aguantó el tipo durante la primera mitad, pero acabó desfondada tras el descanso, cuando el conjunto norteamericano, ya desatado, dio una nueva lección de intensidad, velocidad y ritmo.

Cuatro años después de verse las caras en el Mundial de Turquía, Estados Unidos y Lituania se enfrentaban de nuevo por una plaza en la final de la máxima competición de la FIBA y, aunque con diferentes protagonistas (de aquel triunfo por 89-74 en Estambul 2010 solo quedan Rose, Guy y Curry del equipo USA y Seibutis, Maciulis, Pocius, Jankunas y Jasaitis, por Lituania), el desenlace volvió a ser el mismo.

Esta vez, además, los lituanos se quedaron muy pronto sin opciones. Y eso que arrancó bien el conjunto de Jonas Kazlauskas. Intenso en defensa, cerrando bien el rebote y anotando, eso sí, con dificultad, y casi siempre desde la línea de personal. Una canasta a aro pasado de Pocius rompía la igualdad inicial y colocaba tres puntos por delante a Lituania (10-13, min.5), pero fue un espejismo de lo que iba a pasar: un rodillo. - Efe