Dos tropiezos peligrosos

Donostia. Superada la jornada ocho de la Liga Regular, lo que vendría a ser el primer cuarto de un partido, el Gipuzkoa Basket marcha undécimo en la clasificación con un balance de tres victorias y cinco derrotas y está a la misma distancia del octavo clasificado, el Cajasol, que del 17º, el Estudiantes, que marca la zona de descenso. A priori, un balance correcto y una posición relativamente cómoda en la tabla. Sin embargo, el balance no es tan bueno teniendo en cuenta que hasta ahora el calendario ha sido benévolo y que en Illunbe el equipo de Sito ya ha perdido dos partidos, ambos además frente a dos rivales directos, el Joventut y el Rio Natura Monbus.

El conjunto guipuzcoano abrió la temporada con un importante triunfo frente al Cajasol. Luego encajó una lógica derrota en La Fonteta y en la tercera jornada llegó el primer tropiezo serio, frente al Joventut en Illunbe. El segundo ocurrió este domingo, ante el Rio Natura Monbus. Entre medias, una victoria en casa ante el Bilbao Basket llamado a pelear por cotas más altas pero ahora mismo rival directo en la parte baja y otra a domicilio frente al UCAM Murcia, además de una dolorosa derrota en Tenerife, en un encuentro que estaba en el bolsillo. Haber encajado ya dos derrotas en casa empieza a ser un dato preocupante, porque los dos equipos que han salido ganadores son el Joventut y el Rio Natura Monbus, dos equipos que a priori no parecen superiores al GBC, o no deberían serlo porque también tienen un presupuesto ajustado. Teniendo en cuenta lo difícil que es vencer a los grandes en la actual ACB, los partidos ante rivales de la misma liga valen doble, y más en casa, donde el conjunto guipuzcoano debe hacerse fuerte si no quiere pasar apuros.

En las dos citadas derrotas contra el Joventut y el Monbus, el denominador común fue la baja anotación: 62 ante los catalanes y 63 ante los gallegos. Pese a que en las últimas semanas el GBC parecía mejorar en su faceta ofensiva, ya se podía intuir desde el verano que el equipo iba a tener problemas a la hora de atacar. De hecho, es, con una media de 72 puntos, el tercer equipo menos anotador de la ACB.

En ambas ocasiones coincidió también un día muy malo de Winchester: 0/8 en tiros de campo frente al Joventut y 1/7 frente al Monbus. El americano llegó para ser el escolta tirador y anotador, pero por ahora no está cumpliendo esta función: promedia 6,8 puntos con un 26% en triples y un 27% en tiros de dos. Tampoco está fino en este apartado Charles Ramsdell, que se queda en 6,4 puntos con un 35% en triples y un 25% en lanzamientos de dos. Está claro que si el dos y el cuatro titulares no mejoran en el apartado ofensivo, el equipo de Sito tendrá problemas para alcanzar guarismos altos y, por tanto, para ganar. Hasta el momento, el alto nivel defensivo, con solo 73 puntos encajados de media (sexta mejor defensa del campeonato), es lo que está salvando al GBC.

MANRESA, UNICAJA Y CAI. El conjunto guipuzcoano está obligado a dar un paso adelante y tendrá que hacerlo con un calendario exigente. El domingo juega ante otro rival directo, el Manresa, en una cancha siempre difícil, el Nou Congost. Seis días después recibe al Unicaja, tercer clasificado, en Illunbe y el 22 de diciembre visita al CAI Zaragoza, séptimo en la tabla.