Otro partido de obligada victoria

donostia. "Jugamos en casa contra un rival directo y hay que ganar sí o sí". La frase del capitán, Ricardo Uriz, resume perfectamente lo que es el partido de hoy en el San Sebastián Arena. El Lagun Aro GBC recibe al Assignia Manresa a partir de las 17.00 horas con la obligación de ganar porque juega en casa y porque el rival es inferior. No es una final porque no hay apuros clasificatorios pero la victoria es obligada. En los dos últimos meses, el equipo guipuzcoano solo ha ganado un partido y perder otra vez hoy supondría seguir desilusionando aún más a la afición e impedir que el GBC escale en la clasificación y trate de aferrarse a objetivos más ambiciosos.

Toca plasmar sobre la cancha esa supuesta mejoría que ha visto Pablo Laso en los tres últimos partidos -contra Cajasol, Menorca y Estudiantes-. Si se toma como punto de partido el encuentro anterior a estos tres, el fiasco contra el Fuenlabrada, la mejoría es clara, pero el Lagun Aro no está ni de lejos al nivel que exhibió en los primeros compases de la temporada y deberá jugar mejor que en las últimas semanas si quiere ganar hoy.

La defensa es el gran quebradero de cabeza de Laso. El equipo ha perdido en las últimas semanas la intensidad y agresividad en labores defensivas y así es imposible sumar victorias. El mejor ejemplo es la actuación de hace siete días en Vistalegre, cuando el Lagun Aro recibió 73 puntos a partir del minuto diez con demasiada facilidad. Si los guipuzcoanos defienden como deben hacerlo, Baron recupera su acierto desde 6,75 y Doblas vuelve a ser ese pívot dominante en la pintura, el triunfo no se puede escapar.

el manresa, con lo justo El rival de esta tarde, el Assignia Manresa, marcha tercero por la cola y tiene un triunfo menos que el Lagun Aro. Es un equipo bien trabajado por su entrenador, Jaume Ponsarnau, con las ideas muy claras y con una defensa sólida, que no da facilidades a sus rivales. Viene de hacer 99 puntos al Joventut, pero es el conjunto menos anotador de la ACB, con apenas 65 puntos por encuentro, lo que demuestra que no está sobrado de calidad. Sus cuatro hombres clave son Rodrigo San Miguel, Jordi Grimau, Román Montañez y un pívot, Uros Slokar.