- El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, aseguró ayer que el país no variará las leyes de inmigración como pide el Tribunal de Justicia de la UE y tampoco cambiará las políticas en ese asunto.

“No dejaremos entrar a los migrantes”, afirmó el líder ultranacionalista ante la prensa. Una sentencia del TJUE ordenó a Hungría modificar sus leyes de inmigración que no se atienen a las normas comunitarias.

Según el tribunal europeo, Hungría infringe la legislación de la UE en diversas prácticas de su política hacia los refugiados, incluidas las llamadas “devoluciones en caliente”. Tras esta sentencia del año pasado, el Gobierno de Orbán pidió que el Tribunal Constitucional de Hungría analice la posible supremacía del derecho nacional sobre el comunitario en este asunto, un requerimiento que irritó a Bruselas.

Si bien el Tribunal rechazó cuestionar la primacía del derecho comunitario, aseguró que la constitución húngara protege el derecho del país de determinar su propia unidad territorial y su población, asuntos que forman parte de su soberanía constitucional.