La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, dijo este miércoles que ha llegado la hora de discutir si dotar a la Unión Europea (UE) de competencias en materia de Sanidad, para poder abordar amenazas como la pandemia actual, ante la cual alabó la fortaleza mostrada por los europeos.

"Está más claro que nunca que debemos discutir la cuestión de las competencias en Sanidad", dijo Von der Leyen en su primer discurso del Estado de la Unión Europea, que comenzó con una especial mención a los profesionales sanitarios que se juegan la vida en tiempos de pandemia.

"Debemos crear una Unión Europea de la salud más fuerte", subrayó la presidenta de la Comisión.

En ese contexto, mencionó la necesidad de crear una reserva estratégica para evitar la dependencia de la UE de terceros países, en particular en relación con los medicamentos, y propuso la creación de una nueva agencia para abordar las amenazas y emergencias sanitarias.

También dijo que Bruselas propondrá reforzar y dar más poder a la Agencia Europea del Medicamento y al Centro Europeo de Prevención y Control de las enfermedades.

Además, explicó que tiene previsto convocar una cumbre mundial de salud para tratar de extraer lecciones de la pandemia.

"Debido a que fue una crisis global, necesitamos aprender las lecciones globales. Por eso, junto con el primer ministro (Giuseppe) Conte y la presidencia italiana del G20 el próximo año, convocaré una cumbre mundial de salud en Italia el próximo año ", dijo.

Von der Leyen subrayó que los ciudadanos europeos han mostrado "fuerza de espíritu" durante los meses de la pandemia, y rindió un homenaje a los trabajadores esenciales, sanitarios y en primera línea de la lucha contra el virus.

"Lo hemos visto con los cuidadores que se mudaron a residencias para cuidar a los mayores, con los médicos y enfermeros que se convirtieron en familiares de los que respiraban su último aliento, con los trabajadores de primera línea que día y noche, semana tras semana, se arriesgaron para que nosotros no tuviéramos que hacerlo", señaló la presidenta de la CE.

Su primer discurso del Estado de la Unión, el décimo de la historia comunitaria desde que José Manuel Durao Barroso pronunciara el primero en 2010, se centró en las consecuencias de la pandemia y la necesidad de impulsar una recuperación que permita pasar página.

Reconoció que la pandemia ha puesto de manifiesto "la fragilidad" de nuestras sociedades y apuntó a que "un virus más pequeño que un grano de arena ha expuesto lo delicada que puede ser la vida", así como "los límites de un sistema que valora la riqueza por encima del bienestar".

"Pero la gente quiere salir de este mundo de coronavirus, de esta fragilidad, de esta incertidumbre. Están listos para seguir adelante, y este es el momento de que Europa marque el camino desde esta fragilidad hacia una nueva vitalidad", recalcó la presidenta alemana.

Von der Leyen señaló que "confiar unos en otros y en la UE para dar forma a un mundo mejor" ha resultado en un plan como el de recuperación pospandemia, dotado con 750.000 millones de euros y que se financiará con la emisión de deuda en los mercados con el respaldo del presupuesto comunitario.

"Nos hemos quitado de encima las excusas viejas y las comodidades de lo conocido. Tenemos una visión, un plan, las inversiones. Es momento de empezar a trabajar", dijo Von der Leyen.

La presidenta de la CE anunció además que ha enviado una "carta de intenciones" al presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, y a la canciller alemana, Angela Merkel, cuyo país ostenta este semestre la presidencia del Consejo, para presentarle el plan del Ejecutivo comunitario para el próximo año.

Apoyos a la economía europea

La presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, alertó este miércoles de que "no es momento" de retirar los apoyos políticos a la economía mientras el coronavirus persista, y pidió equilibrar el respaldo financiero y la sostenibilidad fiscal.

"Podemos esperar que nuestras economías empiecen a moverse de nuevo tras una caída del 12 % del Producto Interior Bruto en el segundo trimestre, pero mientras el virus esté merodeando también lo estará la incertidumbre en Europa y en todo el mundo, así que definitivamente no es el momento de retirar apoyos", indicó Von der Leyen durante su discurso sobre el estado de la Unión.

La política alemana dejó claro que "nuestras economías necesitan un apoyo político continuado y debemos lograr un delicado equilibrio entre proporcionar respaldo financiero y garantizar sostenibilidad fiscal".

A largo plazo, consideró que "no hay mejor manera" de afianzar la estabilidad y la competitividad que por medio de una unión económica y monetaria.

"La confianza en el euro nunca ha sido tan fuerte (...) Debemos ahora utilizar esta oportunidad para hacer reformas estructurales en nuestras economías y completar la unión del mercado de capitales y la unión bancaria", subrayó.

Von der Leyen recordó también que, a causa de la pandemia, la CE actuó rápidamente para flexibilizar sus normas de ayudas estatales y autorizó más de 3 billones de euros para apoyar a la industria y las empresas, mientras que el Banco Central Europeo tomó "acciones decisivas".

Dijo que en un "tiempo récord" la UE ha aplicado sus propias herramientas comunes para completar los estabilizadores fiscales nacionales.

Von der Leyen recordó que las pymes son "el motor de nuestra economía y lo serán de nuestra recuperación", y que cerca de 40 millones de personas han solicitado apoyo a través de esquemas como los ERTE.

Apuntó que 16 Estados miembros, "de Lituania a España", recibirán "pronto" cerca de 90.000 millones (en el caso español, la CE ha propuesto una ayuda de 21.300 millones de euros) del programa comunitario de mitigación de los riesgos de desempleo, llamado SURE, que "protegerá millones de empleos".

Igualmente, destacó las oportunidades que ofrece el mercado único y lo consideró "crucial para gestionar la crisis y recuperar nuestra fuerza", por lo que instó a "darle un impulso" y romper las barreras a las que todavía se enfrenta, así como "restaurar las cuatro libertades" en las que se basa "totalmente y tan rápido como sea posible".

Se refirió en concreto a la libertad de circulación de ciudadanos, capitales, bienes y servicios.

"Propondremos una nueva propuesta para el futuro de Schengen", apuntó, sobre el libre movimiento de personas entre los países de la UE, que se ha visto afectado por las restricciones de los viajes durante la pandemia.

Se refirió igualmente a la estrategia industrial que la CE presentó en marzo para liderar la transición verde y digital, y consideró que los últimos seis meses "solo la han acelerado" y ahora, con el nuevo panorama abierto por la pandemia, cuentan con adaptarla en la primera mitad de 2021, así como el marco legal sobre competencia.