- El Banco de Alimentos de Gipuzkoa atiende actualmente a unas 23.200 personas, 1.100 más que a finales del año pasado, de las que aproximadamente la mitad son desplazados por la guerra en Ucrania y el resto, consecuencia de la subida generalizada de precios de “la cesta de la compra”.

Estos datos fueron aportados ayer por el vicepresidente de la entidad, Carlos Martínez, durante la presentación de la campaña Olas solidarias que ha puesto en marcha la Diputación Foral de Gipuzkoa para fomentar la sostenibilidad y la solidaridad durante la temporada de playas.

“Las necesidades se están incrementando, sobre todo desde principios de año”, declaró a los medios informativos Martínez, quien precisó que desde el 1 de enero pasado ha aumentado en unos 1.100 el número de beneficiarios a los que suministran comida.

De ellos, en torno al 50% son personas “provenientes del conflicto de Ucrania”, que estalló el 24 de febrero, y el otro 50% corresponde a perfiles que han acrecentado sus dificultades por el aumento de precios de productos y servicios.

Esta última circunstancia afecta además “doblemente” a la actividad del Banco de Alimentos, remarcó Martínez, puesto que por un lado provoca que cada vez más personas necesiten su ayuda y por otro la entidad “puede comprar menos” productos con las donaciones económicas que recibe.

Ha considerado no obstante que la ONG tendrá recursos “suficientes para atender las necesidades de las personas que peor lo están pasando”, gracias a “las colectas” que ha comenzado a hacer de nuevo en centros escolares y en comercios del territorio.

Pero en algunos lugares del Estado ha comenzado a ser notorio el problema de suministro de algunos productos concretos. Por ejemplo, en el Banco de Alimentos de Madrid se agotó el aceite por primera vez en su historia, hecho que atribuyó principalmente al aumento de los precios de este producto y a la falta de existencias.

Martínez subrayó también la importancia de las recogidas de alimentos que el Banco de Alimentos hará a través de la campaña foral de playas, que recorrerá a partir de hoy y durante 9 semanas otros tantos arenales de 8 localidades del territorio.

Para esta ocasión y debido a que la recolecta se hará en una furgoneta estacionada en los accesos a las playas, Carlos Martínez demandó que la contribución se haga con “alimentos no perecederos” y que no se estropeen por el calor, como pasta, arroz, conservas de pescado, aceite y pañales infantiles.

La subida se explica tanto por la llegada de personas que huyen de Ucrania como por el aumento de los precios

Las próximas nueve semanas se realizará una recogida de alimentos en los accesos a un total de ocho playas de Gipuzkoa