El grupo socialista ha decidido retirar este miércoles la enmienda relativa a la prostitución en la ley del solo sí es sí con el fin de salvar esta norma, por lo que previsiblemente saldrá adelante en la Comisión de Igualdad pese al voto en contra del PP.

Fuentes socialistas han precisado que han tomado esta decisión porque hay grupos que han hecho un "ejercicio de responsabilidad", ya que quieren que salga adelante esta ley, pero no son partidarios de abordar ahora el debate de la prostitución.

Las mismas fuentes advierten de que "a quien le correspondía cerrar estas negociaciones es al Ministerio de Igualdad y a Unidas Podemos y no al PSOE".

La decisión del PSOE se ha conocido en la Comisión de Igualdad, que debate y vota el dictamen de la ponencia sobre la ley, mientras los portavoces de los grupos contrarios a la enmienda acusaban a los socialistas de "embarrar" y "pervertir" la ley.

Se trata de la enmienda 184 del PSOE con la que este grupo defendía que reforzaba la lucha contra el proxenetismo en la ley del solo sí es sí ante la falta de acuerdo con los aliados del Gobierno, varios de los cuales están a favor de la libertad de la mujer que ejerce la prostitución.

Y la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, mostró ayer su temor a que hubiera un pacto entre PSOE y PP en ese asunto lo que a su juicio podía poner en peligro el conjunto de la ley, ya que si se incorporaba al texto final la enmienda socialista no iba a tener los apoyos suficientes de sus socios de Gobierno.

Y volvió a ofrecer al PSOE aplazar a una futura ley contra la trata o a otra ley específica los artículos sobre el proxenetismo que se incluyeron en el proyecto.

Esos artículos penalizan el proxenetismo no coactivo (no violento) y también a quien se lucre con el alquiler de locales destinados a favorecer la explotación de la prostitución (la tercería locativa).

Fuentes del PP vinculan la decisión del PSOE a la presión de su socio de Gobierno en el Congreso ya que una vez que los populares iban a apoyar esa enmienda, los aliados de la investidura de Pedro Sánchez amenazaban con echarla atrás.

No obstante, el PP había anunciado pocos minutos después de empezar la comisión que también rechazarían el dictamen.