Este domingo se cumple un mes de la agresión sexual que sufrió una vecina de Tolosa durante las fiestas del Carnaval del municipio, unos hechos que continúa investigando la Ertzaintza sin que por el momento las pesquisas abiertas hayan permitido la identificación o el arresto de los autores. Según indican fuentes cercanas a la investigación, se sospecha de la implicación de tres personas.

La agresión a la joven de 18 años se produjo en plena vía pública el Domingo de Carnaval. La localidad se encontraba inmersa en la celebración de sus populares fiestas. La villa disfrutaba de un Zaldunita con el que prácticamente nadie contaba tres semanas atrás debido al marco normativo tan cambiante provocado por la sexta ola de la pandemia, que finalmente remitió y permitió la fiesta.

Miles de personas se echaron a la calle, entre ellas las personas que abordaron a la joven. Era, de hecho, la primera cita multitudinaria tras un año marcado por las restricciones. El Departamento vasco de Seguridad reconoce que las circunstancias en las que se produjo la agresión sexual, "con tantas personas bajo su disfraz y en pleno bullicio festivo", suponen una dificultad añadida en la investigación.

A diferencia de otras agresiones en contextos similares que suceden a altas horas de la madrugada -ambiente festivo e ingesta de alcohol-, la joven fue abordada a las 20.30 horas en una zona céntrica de la localidad.

En la localidad, que ronda los 20.000 habitantes, todo el mundo se conoce y hechos de esta naturaleza no han pasado desapercibidos para nadie. En el marco de las reuniones periódicas de coordinación que mantiene el Ayuntamiento de Tolosa con la Guardia Municipal y la Ertzaintza, la agresión sexual sigue siendo uno de los temas que están encima de la mesa.

ESCLARECER LO OCURRIDO

La Ertzain-etxea de Oria se ha hecho cargo de las diligencias policiales para esclarecer lo ocurrido. Según fuentes cercanas a la investigación, tres personas serían las que están implicadas. Desde el primer momento en que la víctima denunció los hechos, recibió asistencia de la Ertzaintza, así como atención sanitaria en el Hospital Donostia. El Consistorio ha permanecido en contacto con la familia durante este mes.

Ante la gravedad de los hechos, la Asamblea Feminista de la localidad hizo un llamamiento a la participación en una concentración de repulsa que fue secundada por miles de vecinos de Tolosa en la Plaza del Triángulo y en las calles adyacentes. La Asamblea Feminista, la Comisión de Fiestas y diferentes grupos sociales del municipio expresaron su "más profundo rechazo, indignación y rabia" por la agresión, que denunciaron "enérgicamente".

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En paralelo a estos hechos, ese mismo día, una mujer denunciaba haber sufrido una violación grupal en Barakaldo, por la cual dos hombres de 20 y 23 años fueron detenidos como presuntos autores de sendos delitos de agresión sexual y robo con violencia.

Los hechos ocurrieron alrededor de las seis y media de la mañana. Al parecer, la mujer fue abordada en la calle por varios individuos que introdujeron de forma violenta en un portal y en el interior del mismo le habrían agredido sexualmente. Posteriormente le sustrajeron el teléfono y el bolso que portaba. También se abrieron diligencias en calidad de investigados a otros dos varones.

Hechos que se producen en un contexto en el que Euskadi registra 450 denuncias al mes por violencia machista, ante la que se sucedan las muestras de condena. Decenas de personas se concentraron el sábado pasado frente al Ayuntamiento de Irun para denunciar la agresión machista ocurrida dos días antes.

La Ertzaintza fue alertada por la Policía Municipal de que un hombre había agredido sexualmente a su pareja y también la había golpeado, insultado y amenazado en una vivienda de Irun, según informó el Departamento de Seguridad. El sospechoso fue localizado poco después en una estación de tren y fue detenido y puesto a disposición de la autoridad judicial.

Una semana antes el Ayuntamiento de Bergara había convocado una concentración de repulsa por otra agresión machista que sufrieron dos mujeres por parte de un varón en el municipio. Un total de 1.790 víctimas de violencia de género reciben algún tipo de protección en Gipuzkoa por parte de la Ertzaintza. En el conjunto de Euskadi el número de personas con expediente policial de protección por violencia doméstica o de género asciende a 4.720, según la información facilitada en noviembre por el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco.