- La asociación de ikastolas, Ikastolen Elkartea, pidió ayer a los gobiernos vasco y navarro que deroguen la obligatoriedad para los alumnos de Primaria del uso de mascarillas en los espacios al aire libre de los centros de enseñanza.

En un comunicado, la asociación señaló ayer que las medidas anticovid adoptadas en la etapa de educación Primaria durante el último año han sido “muy duras”, pero “necesarias e imprescindibles”, ya que lo “prioritario” eran “la salud y el cuidado mutuo”.

En la actualidad, apunta, la incidencia del coronavirus “ha descendido considerablemente, lo que ha permitido flexibilizar estas medidas, con lo que hemos comenzado a respirar”. Sin embargo, critica que las nuevas medidas que se han adoptado a nivel social, en general, “no han tenido el mismo reflejo en el mundo educativo”.

En ese sentido, la nota señala que, a pesar de que en los últimos decretos publicados por el Gobierno Vasco y el de Navarra “se han flexibilizado algunas medidas, se ha mantenido la norma que obliga a los alumnos de Primaria a permanecer con la mascarilla, incluso en la hora del patio”, lo que les genera “una gran preocupación”.

Ikastolen Elkartea advierte de que “el impacto directo de la pandemia en su entorno más cercano y el estricto protocolo establecido en los centros educativos han tenido efectos significativos en el alumnado, tanto en el aspecto emocional como en el académico”. Así, señala que un estudio realizado por el propio Gobierno Vasco pone de manifiesto que el efecto covid “ha condicionado el rendimiento de los alumnos y no para bien”.

De hecho, indica, “el 72% de los alumnos se ha sentido más desmotivado para estudiar y dos de cada tres (65,4%) han percibido que su nivel académico ha bajado”. Teniendo en cuenta estos antecedentes, la asociación considera que “el mantenimiento de las medidas hasta ahora existentes en lo que respecta a los niños y niñas de Primaria puede profundizar en estas consecuencias”.

A Ikastolen Elkartea le preocupa “especialmente las consecuencias que pueden acarrear en el aspecto emocional de este alumnado” porque estos niños y niñas son “el único colectivo que se ve obligado a llevar mascarilla estando al aire libre” y porque, además, el de la escuela es “el único espacio al aire libre en el que están obligados a hacerlo”.

“Es decir, los niños y niñas de entre seis y doce años pueden sentirse marginados y, a su vez, considerar todo el ámbito escolar como el único espacio en el que están obligados a usar mascarilla”, manifiesta. A su entender, el hecho de ser el único colectivo al que no se ha vacunado “no justifica que se mantenga esta medida, teniendo en cuenta que en el resto de zonas al aire libre pueden circular y permanecer sin mascarilla”.