La apertura oficial del curso 2021-2022, el segundo en pandemia, ha llegado cargado de mensajes de gran calado político además de mascarillas, distancias y grupos burbuja. El consejero de Educación, Jokin Bildarratz, que ha elegido el CEIP Luis Elejalde-Rogelia de Álvaro, situado en el barrio gasteiztarra de El Pilar, ha dejado tres ideas encima de la mesa. La primera, el compromiso del Gobierno vasco por reeditar la presencialidad este curso, para lo que se mantendrán a los 1.064 docentes adicionales contratados el curso pasado hasta el 31 de agosto. En segundo lugar, los esfuerzos del Departamento se dirigirán a mejorar la percepción social del profesorado, con el fin de poner en valor "la magnífica labor realizada el pasado curso", ha dicho Bildarratz.

Educación también quiere que este sea el 'curso HH", el curso del Acuerdo Educativo (Hezkuntza- Hitzarmena) previo a la aprobación de la Ley vasca de Educación, dando continuidad así al prolongado proceso de diálogo abierto con el mundo de la enseñanza, que la pandemia truncó. En este sentido, el consejero Bildarratz ha reiterado la necesidad de trabajar por una actualización y modernización de la escuela vasca: definir una estrategia común, en la que agentes educativos y políticos acuerden los principales retos y estrategias para los próximos años.

Bildarratz ha señalado que "la educación es parte de nuestra sociedad, y tenemos ilusión por avanzar. Tenemos que seguir trabajando conjuntamente para mejorar, en beneficio de la sociedad. Vamos a esforzarnos en lograr un acuerdo lo más amplio posible entre toda la comunidad educativa". En palabras del titular de Educación, Euskadi tiene "la oportunidad de modernizar, actualizar y mejorar nuestra educación". Dicho de otro modo, se quiere acordar una base que sirva a la escuela vasca para responder a los retos y objetivos de los próximos 30 años. "Sé que el acuerdo siempre es complicado, pero estoy convencido de que en este ámbito, en el de la Educación, y en este momento, vamos a ser capaces de acercar posturas y trabajar codo con codo", ha afirmado Bildarratz.

RETOS DEL CURSO

Entre los retos para el nuevo curso que hoy arranca, el consejero ha destacado el bienestar emocional y la salud mental, tanto del alumnado como del profesorado, como "un aspecto a abordar con actuaciones educativas que permitan minimizar el impacto negativo derivado de la situación de pandemia vivida durante más de año y medio". Junto con el aspecto emocional, también se ha referido a otras cuestiones como son el impulso a programas de liderazgo educativo; los programas para desarrollar la digitalización; las acciones para dotar de mayor autonomía a los centros con una mayor complejidad; los programas para reforzar una mejor comunicación, en un contexto plurilingüe; o la apuesta por una estrategia que ayude a reforzar una escuela plural e inclusiva.

Bildarratz también ha mostrado su esperanza de que en este curso "se pueda hablar más de educación y algo menos sobre la pandemia, y poner a su vez la lupa en una figura fundamental para la educación: la figura del profesor o profesora". Bildarratz ha expresado su deseo de que este curso sirva para que "la figura docente recupere el prestigio social que le corresponde, tras haber demostrado -una vez más- su compromiso y toda la aportación que realiza a la sociedad".

MENOS ALUMNOS

La fotografía del curso respecto a número de estudiantes, elección de modelos lingüísticos y redes, pocas o ninguna novedad. Aso sí, la crisis de natalidad sigue vaciando aulas de Infantil y Primaria, este año 2.000 estudiantes menos.

- Martícula: El curso comienza en Euskadi con 366.697 alumnos y alumnas en las etapas educativas no universitarias, es decir, desde Educación Infantil hasta Bachillerato y Formación Profesional. Esta cifra representa un descenso del 1,41% respecto al curso pasado.

- Crisis de natalidad: La caída en el número de alumnado se sigue produciendo, debido al descenso de la tasa de natalidad, en las etapas inferiores: en Educación Infantil y en Educación Primaria. En Infantil, la caída es del 5,08% en la etapa 0-2 años, y del 6,21% entre los 3-5 años, en relación al pasado curso. En Primaria, el alumnado desciende un 1,79% este año. Tanto en la ESO como en Bachillerato, las cifras globales no presentan variación significativa.

- Pública/ concertada Respecto a la red que las familias eligen para la escolarización de sus hijos e hijas, red pública o red concertada-privada, esta elección se mantiene similar a la de años anteriores, si bien la pública sigue siendo elegida por algo más de la mitad. El 51,2% de las familias se decanta por esta red, mientras que el 48,8% lo hace por la privada-concertada.

- Modelos lingüísticos: En relación a los modelos lingüísticos, también sigue la tendencia de los últimos años: el modelo D sigue siendo el más demandado entre el global del alumnado, y crece en la etapa de Infantil: en la franja de edad de 3-5 años, este modelo es el más demandado y sube 0,7 puntos, con el 81,9% de su alumnado en el modelo D. El modelo B es elegido por el 15,3%, y el modelo A por el 2,9% de las familias, en la citada franja de edad.

- Formación Profesional: Se dispone ya de datos de matrícula a fecha de 6 de septiembre, con 44.486 alumnos y alumnas matriculados hasta ese día. El periodo de matriculación en la Formación Profesional permanece abierto hasta el 15 de junio (el alumnado que no participó en el proceso de admisión abierto en junio se podrá inscribir en las plazas que quedan libres).