"El exceso de relajación es el peor criterio". Con esta advertencia el lehendakari Iñigo Urkullu ha realizado este jueves un llamamiento "cívico" a la ciudadanía vasca para que, aunque no sea obligatorio, se limite la movilidad nocturna desde la una a las seis de la madrugada y se limite la agrupación de personas a un máximo de seis personas, excluidos convivientes. Es más, el lehendakari ha advertido de que descarta acudir a los tribunales para solicitar un toque de queda.

El Lehendakari ha comparecido posteriormente para anunciar las medidas que se incluirán un nuevo decreto, con la obligación de llevar mascarilla en los entornos urbanos transitados y que todas las actividades, entre ellas la hostelería, cierren a la una de la madrugada.

El decreto, que entrará en vigor este viernes, aunque lo concerniente a una mayor limitación de aforos estará vigente a partir del próximo lunes, incluye cuatro "llamamientos cívicos" a la ciudadanía, en base a la Ley Antipandemia Covid del Parlamento Vasco.

De esta forma, se insta a la ciudadanía, "sobre la base de su autorresponsabilidad, a una autolimitación voluntaria", para que la movilidad nocturna se restrinja durante la franja horaria de una a seis de la madrugada, la agrupación máxima de personas sea de seis, excluidos convivientes; se proceda a un "autoconfinamiento y autoaislamiento personal en cuanto se experimenten los primeros síntomas de contagio por covid, y se comunique a los servicios sanitarios".

Muy molesto con Pedro Sánchez

El lehemdakari también ha contestado al presidente Pedro Sánchez que "la gravedad de la situación" de la pandemia "exige un mayor nivel de ejercicio de responsabilidad", y ha recordado que ha solicitado al Ejecutivo herramientas para poder adoptar medidas restrictivas con el objetivo de "intentar atajar, contener o cortar de raíz la transmisión comunitaria", no solo para Euskadi, sino para el conjunto del Estado.

El lehendakari ha afirmado que el problema es que no ha recibido "respuesta" por parte del presidente del Gobierno, lo que le "provoca un estado de ánimo no positivo" respecto a la "dinámica" que conoce en su actuación.

"No es solamente que no me haya respondido al escrito que yo envié el lunes y que haya persistido en la ratificación del Real Decreto ley ayer en el Congreso de los Diputados, sino que ha habido otras ocasiones anteriores en los que me he dirigido a él y no he obtenido respuesta, y en su caso, cuando he obtenido respuesta, ha sido que ya tenemos las herramientas suficientes las comunidades autónomas o que existe el Consejo Interterritorial", ha reprochado.

Para Iñigo Urkullu, "la gravedad de la situación exige un mayor nivel de ejercicio de responsabilidad". "Es lo que yo pretendo, un ejercicio de responsabilidad absoluta, me gusten o no las decisiones que debamos adoptar", ha subrayado.

Urkullu ha reconocido que no le gustan las "decisiones que puedan suponer medidas restrictivas", pero ha subrayado que se trata de un "ejercicio de responsabilidad" que se debe hacer, adoptando medidas para "intentar atajar, contener o cortar de raíz la transmisión comunitaria de un virus que es mutante".

"Ese es mi ejercicio de responsabilidad y con ese ejercicio de responsabilidad es con el que me dirijo al presidente del Gobierno español, en orden a una interpretación, no solo para la Comunidad Autónoma de Euskadi, sino para el conjunto del Estado", ha concluido.