Está siendo un 8-M atípico, con menos personas que de costumbre y separados por columnas para garantizar las distancias, pero la reividicación se ha mantenido intacta o incluso más necesaria que nunca. "Con la pandemia, mucho más motivo para salir a la calle. Por todas esas mujeres dedicadas al cuidado y a la sanidad y por otras muchas que no pueden venir", ha apuntado Ana, una de las manifestantes protegida con una de las decenas de mascarilla moradas que se han visto esta tarde en la manifestación en Donostia.

Cumpliendo con todas las medidas de seguridad, el grupo ha desfilado por las calles de la capital guipuzcoana de la misma manera que lo han hecho otros colectivos como los hosteleros en fechas recientes. "Parece que solo contagiamos o somos peligrosas nosotras. A los demás no se les ha mirado tan mal", han afirmado Maider y June, que han puesto como ejemplo la situación en Madrid, donde las concentraciones han sido prohibidas.

No ha sido la situación de Gipuzkoa, pero la limitación de movilidad sí que ha deducido a buen seguro el número de manifestantes. "Esto tiene que ser la demostración de que haciendo las cosas bien, respetando las distancias y usando la mascarilla, se puede salir a la calle a manifestarse", han agregado Lorena y Eva, otras dos mujeres que se acercaron a la protesta.

Precisamente, según varias de las manifestantes, la pandemia ha hecho más necesaria si cabe la reivindicación de la situación de las mujeres en sectores como el sanitario o el de cuidados. "No es que nos hayan estigmatizado, es que siempre nos han tratado así. Nos han hecho creer que siempre hemos tenido la culpa de todo", ha asegurado Pakita, una veterana manifestante. "La esperanza está en los chicos que no son machistas. Son más necesarios que nunca", ha añadido.

"Más que nunca, con la que está cayendo se nos tiene que ver en la calle. Este 8-M es más necesario que nunca", ha agregado Agurtzane, otra experta en estos lares, que no ha dudado en vestir con abrigo, mascarilla y pañuelo morados. "Como todos los años la reivindicación no solo tiene que ser este día, se tiene que dar todo el año. Aún así es importante que se nos asocie con salir a la calle cada 8-M", ha explicado, por su parte, Maite, otra manifestante.

De este modo, a pesar de la pandemia, de las restricciones de movilidad y del toque de queda, decenas de mujeres y también hombres volvieron a salir ayer a las calles guipuzcoanas. "Tenemos que tenerle miedo al virus, pero no nos puede limitar porque lo que está en juego es muy importante", han apostillado, por último, un grupo de chicas.