- Pese a las restricciones de movilidad y de reuniones de más de seis personas, al toque de queda y a las advertencias continuas desde las instituciones de hacer la mínima vida social posible para evitar la propagación del COVID-19 -en números muy altos en Euskadi desde hace ya varias semanas-, siguen produciéndose encuentros no permitidos. Este pasado fin de semana, más de 50 personas han sido denunciadas por la Ertzaintza, la mayoría de ellas después de las 22.00 horas, por realizar fiestas y botellones sin cumplir las medidas sanitarias.

De este más de medio centenar de sanciones, 28 se produjeron en Gipuzkoa, según datos facilitados por el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco. En Irun, la Ertzaintza sancionó a catorce personas que hacían un botellón en un parque a la una de la madrugada, mientras que en Oiartzun otras catorce personas fueron sorprendidas haciendo otro botellón a las seis de la tarde sin hacer un uso correcto de la mascarilla.

En Bilbao fueron sancionadas once personas que realizaban una fiesta en un piso del Casco Viejo a las dos de la madrugada y otras seis en una habitación de un céntrico hotel, donde también se encontraban de fiesta. Además, en Vitoria seis personas fueron denunciadas por estar en la zona Gazalbide haciendo ruido pasada ya la una y media de la madrugada.

menos sanciones

En cualquier caso, y a falta de que el Departamento de Seguridad haga estos próximos días un balance más extenso del fin de semana, parece que serán menos las sanciones en comparación con el fin de semana del 7 y 8 de noviembre, cuando el balance fue de 750 denuncias registradas por la Ertzaintza y las policías locales. De ellas, 448 fueron por incumplir la limitación de movilidad, la restricción de reuniones de más de seis personas y el toque de queda nocturno. Además, hubo 217 sanciones por no usar la mascarilla o hacerlo de forma inadecuada y 35 referidas al consumo de alcohol en la vía pública.