Hay historias que merecen ser contadas porque muestran el lado más solidario del ser humano. Ese que en estos complicados momentos consigue alegrar la pena del alma y comprobar cuáles son las cosas verdaderamente importantes. Gorka Pérez, un estudiante Erasmus de 20 años pudo pasar la noche con sus padres gracias a la buena voluntad de Iñaki Sánchez, un taxista con licencia en Basauri.

Sánchez se prestó gratuitamente a viajar a Barcelona para recoger al joven que aterrizó ayer en El Prat después de hacer una escala de 16 horas en Fráncfort. Sobre las 15.00 horas, tras seis horas de viaje y una carrera de 1.200 kilómetros de 843 euros, el coche de Iñaki llegó al barrio erandioztarra de Astrabudua.

El importe de la carrera era de 843 euros

La emoción se palpaba en el ambiente; el sentimiento de agradecimiento de la familia y amigos se transformaron en lágrimas que no se hicieron esperar en los ojos de Jose Pérez, el padre de Gorka: "No puedo estar más agradecido. No voy a tener vida para pagar a Iñaki lo que ha hecho por mi familia. Esta noche Gorka la pasa en casa gracias a él. No teníamos forma de que pudiese venir y a mí no me dejaban ir a buscarle hasta Barcelona", repetía el progenitor. Fue tal la emoción que envolvió el momento que sin pensarlo Jose e Iñaki se fundieron en un cálido abrazo. "Hoy no pienso ni en el coronavirus. Esto no acaba aquí. De este momento va a surgir una amistad para toda la vida", comentó Jose.

Junto a él aguardaban expectantes la llegada del coche, la abuela de Gorka, su pareja, el hermano y Jon Gómez, periodista de Radio Nervión y el culpable de dar vida a esta maravillosa historia con final feliz. Y es que la magia de la radio y de las ondas lograron el lunes despertar la solidaridad de Iñaki que escuchó en el programa El madrugador la desesperada petición de un padre que no tenía forma de traer de Barcelona a su hijo. "Por el covid todos los vuelos estaban anulados. Finalmente pagamos un billete para traerle a casa, pero una vez en Barcelona no tenemos manera de que viniese. Los autobuses, el tren estaban repletos... no le alquilan un coche porque solo tiene dos años de carné de conducir. No sabemos qué vamos hacer", relató el lunes Jose. La llamada milagrosa no se hizo esperar. Al otro lado de la radio, Iñaki, un taxista con licencia en Basauri escuchó el mensaje y no dudó en coger el teléfono y llamar a Jon para prestarse a traer al joven gratis. "Facilítale mi teléfono que yo me voy a Barcelona y le traigo a casa". Dicho y hecho. Iñaki partió de madrugada a Barcelona al rescate del joven de Erandio. "Cuando escuché en la radio a Jose ni me lo pensé. Soy padre y recuerdo cómo lo pasamos mi mujer y yo cuando mi hija se fue Argentina. No he hecho nada especial que no haría otra persona", comentaba.

El único problema que se encontró Iñaki en la carrera a Barcelona lo tuvo en El Prat cuando los taxistas del aeropuerto, al comprobar la presencia de un servicio especial de Bilbao, llamaron a los Mossos para denunciarlo: "Se han enfadado mucho y eso que no sabían que lo estaba haciendo gratis. Si se enteran, no salgo de ahí", comentó en broma. Tras mostrar toda la documentación a la policía y aclarar la situación, Iñaki y Gorka partieron rumbo a casa. A las 15.00 horas la maleta de Gorka tocó suelo vizcaino: "Hemos parado para comer algo y casi todo el viaje he venido durmiendo", dijo Gorka.

Jon Gómez, que no pudo faltar al encuentro, contuvo la emoción como pudo tras una mascarilla. "Tenemos los mejores oyentes", soltó con ojos humedecidos. Gómez reconoció que historias así hacen que le guste cada vez más lo que hace: "Solo por esto merece la pena todo. Este tipo de historias hacen que ame cada vez más el mundo de la radio", concluyó el periodista.