- La Mesa de Playas de Gipuzkoa vuelve a reunirse hoy para continuar fijando las condiciones para los arenales del territorio. Será el tercer encuentro que se produce en las últimas semanas y participarán el diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, junto con los alcaldes de los Ayuntamientos de las localidades costeras de Hondarribia, Orio, Zarautz, Getaria, Zumaia, Deba y Mutriku; y la concejala de Espacios Públicos de Donostia, Marisol Garmendia.

En la anterior reunión decidieron abrir la temporada oficial de playas el 1 de julio -aunque con servicio de socorrismo garantizado desde el 15 de junio- y fijar en tres horas la estancia máxima en los arenales como medida para evitar aglomeraciones, además de recomendar el distanciamiento social como mejor manera de evitar posibles contagios.

Sin embargo, no se fijaron medidas concretas para controlar el aforo y los accesos a las playas, que es el gran reto que tienen de cara al verano los municipios costeros. En este sentido, se espera que hoy decidan qué medidas tomar, por ejemplo crear una aplicación con la que consultar el aforo desde el teléfono móvil o controlar los accesos con personal contratado para esta labor.

La jornada de ayer volvió a dejar la imagen de los accesos a la playa de La Concha cerrados con pleamar. La marea alta era a las 12.40 horas, por lo que en principio debería haberse cerrado desde las 10.40 horas. A esa hora, aunque no se apreciaban aglomeraciones, había bastantes usuarios en la playa y seguía bajando más gente, lo que obligó a los agentes de la Guardia Municipal finalmente a cerrar el acceso a eso de las 12.00 horas. En cualquier caso, fueron bastantes las personas que permanecieron en el arenal pese a los avisos lanzados desde megafonía.

Esta pasada semana el Gobierno Vasco recomendó hacer un uso "dinámico" de las playas, es decir, hacer deporte, bañarse y pasear, y no tumbarse a tomar el sol. Se trataba de una recomendación, no una obligación, y este fin de semana solo los ayuntamientos de Orio y Getaria movilizaron agentes para invitar a la gente a no tumbarse al sol, mientras que los otros municipios han permitido el uso libre.