- El Consejo de Gobierno de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) aprobó ayer convocar sus Ayudas Reintegrables dirigidas a estudiantes con dificultades económicas con la habitual modalidad para financiar la matrícula del curso y una nueva que estará dirigida a afrontar gastos extraordinarios derivados de la crisis sanitaria del COVID-19.

Según explicó la universidad vasca, estas ayudas están dirigidas a estudiantes que presenten dificultades económicas debidas a circunstancias sobrevenidas o que perduren en el tiempo una vez iniciados los estudios universitarios. Como en años anteriores, habrá ayudas reintegrables para financiar el importe de la matrícula correspondiente al curso 2019-2020 pendiente de pago.

Además, en esta ocasión, se añade una nueva modalidad dirigida a afrontar gastos extraordinarios derivados de la crisis sanitaria y que tiene como finalidad “facilitar al estudiantado beneficiario el acceso y seguimiento de sus estudios por medio de las herramientas didácticas y tecnológicas precisas para desarrollar la actividad académica”.

Estas ayudas podrán ser solicitadas por las personas que se matriculen en la Universidad del País Vasco durante el curso 2020-2021 y que estén cursando estudios de grado o de máster universitario con atribuciones u orientaciones profesionales, o por quienes estén finalizando sus estudios en el curso 2019-2020.

Los solicitantes deberán justificar una dificultad económica sobrevenida posterior al comienzo del curso académico “o que la situación económica adversa que padezcan perdure en el tiempo, una vez iniciados sus estudios universitarios”, y que no hayan recibido becas o ayudas al estudio para el curso 2019-2020. No se tendrán en cuenta compromisos del curso anterior que no se hayan podido cumplir a causa del inicio del estado de alarma por la pandemia, explicó la UPV/EHU.

Para efectuar el reintegro de la ayuda, se contemplan dos modalidades, de manera que se hará en metálico o, en determinados supuestos, además del reintegro en metálico, la ayuda económica por el importe de matrícula pendiente de pago podrá ser compensada parcialmente mediante el desarrollo de actividades de colaboración que, “en ningún caso, pueden sustituir servicios profesionales remunerados”.

Desde que en el curso 2012-2013 se puso en marcha este programa, 178 personas han sido beneficiarias y de ellas, hasta ahora, 41 han finalizado sus estudios.