- Después de no tener ningún fallecido por coronavirus el sábado -situación que no se daba desde el 17 de marzo-, Euskadi registró seis muertes el domingo, según el último balance facilitado por el Gobierno Vasco, mientras que el número de nuevos positivos detectados fue de apenas dos, ambos en Bizkaia. El número de fallecidos desde el inicio de la pandemia ha alcanzado la cifra de 1.500 y el de contagios es de 19.392 en la CAV.

Un total de 17.417 infectados se han recuperado de la enfermedad, después de que el domingo se curaran 23, lo que supone un 89,8 % de los contagiados. La situación en los hospitales sigue mejorando y en el último balance son 33 los ingresados en cuidados intensivos en todo Euskadi. De ellos, cinco se encuentran en el Hospital Donostia.

Además, la tasa R0, que mide el número de contagios que provoca un enfermo, se sitúa en 0,69, ligeramente por encima del 0,66 que marcaba el anterior balance.

A estos buenos números se refirió Mikel Sánchez, director de Planificación, Ordenación y Evaluación Sanitarias del Gobierno Vasco, en una entrevista ayer en Radio Euskadi: “La situación se va normalizando, dicho esto con precaución. Los datos que tenemos nos hacen ver que la evolución es buena, pero estamos en una fase de vigilancia activa. No podemos perder la perspectiva desde el punto de vista sanitario”.

Sobre la posibilidad de pasar antes a la fase 3, Mikel Sánchez insistió en que “la evolución es realmente buena”: “Si esto sigue así tendremos que normalizar la situación tarde o temprano”.

Déficit de enfermeras. El sindicato de enfermería Satse aseguró ayer que existe un déficit de enfermeras en las unidades de cuidados intensivos (UCI) de los hospitales de Osakidetza. En un comunicado, Satse señaló que en las UCI de Osakidetza hay de media 2,2 pacientes por enfermera en el turno de mañana, empeorando a 2,3 en el turno de tarde, noche y durante los fines de semanas, cuando por su nivel asistencial debería ser de, como mucho, dos pacientes por enfermero. Según el sindicato, tres de cada cuatro UCI en Euskadi sufre un déficit de profesionales, por lo que reclamó que se refuercen las unidades, que se han mostrado durante la pandemia como un elemento clave del sistema sanitario.