- La parálisis que ha provocado la pandemia en todos los órdenes de la vida también ha dejado su impronta en los tribunales, provocando ya la suspensión de 4.000 juicios en Gipuzkoa, con la estimación de que el número de procedimientos acumulados alcance incluso los 6.000, según fuentes judiciales consultadas. La normalidad en las sedes no se restablecerá completamente, al menos, hasta dentro de un mes, con el consiguiente aumento de asuntos por ventilar.
Siguiendo una secuencia similar a la de otros tantos sectores, de un día para otro fue necesario suspender todas las actuaciones judiciales. Apenas han transcurrido dos meses pero el volumen de trabajo que se avecina no tiene precedentes en los tiempos mas recientes, con la sobrecarga añadida de todas las incidencias derivadas directamente de la propia crisis, como asuntos laborales, ERTE, contratos de trabajo y aspectos relacionados con el Derecho de Familia. "Ha sido un parón en seco, tan en seco que a los pocos días conocí que no se estaban inscribiendo las defunciones, poniéndolo de manifiesto, situación que se revirtió", expone a modo de ejemplo Lourdes Maiztegi, decana del Colegio de Abogados de Gipuzkoa.
La actividad durante el estado de alarma se ha limitado a las actuaciones judiciales esenciales o urgentes. Los profesionales han continuado en primera línea en unas condiciones de trabajo difíciles. "Han realizando una labor digna de reconocimiento, y podíamos haber desarrollado más actividad si la Administración de Justicia hubiera estado dotada de medios", añade Maiztegi.
La falta de recursos personales y materiales ha sido siempre la eterna compañera de la Administración de Justicia, una falla que la pandemia ha acabado por evidenciar. Así se percibe también en la Audiencia de Gipuzkoa, donde los jueces se han encontrado ante la imposibilidad de teletrabajar, como se propugna desde la Administración, animando incluso a estar el menor tiempo posible en el puesto laboral.
Tal y como está configurado el sistema es, sencillamente, imposible. La Administración de Justicia en la Comunidad Autónoma del País Vasco no dispone, como en otros territorios, de un Expediente Judicial digital, "lo que impide una gestión judicial razonable, y no se puede esperar más tiempo", comparten jueces y abogados.
Además de seguir manejando papel, no hay por el momento posibilidad de acceso remoto al programa. "Podemos trabajar en casa la resolución, pero para introducirla en el sistema tenemos que hacerlo manualmente en el despacho", explica Augusto Maeso Ventureria, magistrado de la audiencia provincial y portavoz de juezas y jueces para la democracia en Gipuzkoa.
Un sistema de trabajo que a su entender no se acomoda a los nuevos tiempos. "Es una pena porque en materia de informática judicial y en tantos otros aspectos, el Departamento de Justicia fue pionero hace veinte o treinta años. Éramos la envidia fuera de Euskadi, pero hemos pasado de ser pioneros a estar en el furgón de cola. Ahora mismo estamos peor que en comunidades como Navarra, La Rioja, Castilla y León... Pese a las advertencias de los últimos años, el Departamento de Justicia no ha respondido a estas necesidades, y las carencias que tenemos se han hecho clamorosas con esta crisis", lamenta el magistrado.
Desde el primer momento de la crisis sanitaria se ha evidenciado la imposibilidad de incorporar las nuevas tecnologías de comunicación en las asistencias al detenido en sede policial. El Colegio de Abogados indica que en Gipuzkoa, "a pesar de la buena disposición de los responsables de la Ertzaintza", no existían los medios apropiados, una situación que se consiguió solventar pasados unos días.
Desde el 15 de abril, rememora Maiztegi, era posible la presentación telemática de demandas, una medida "razonable" adoptada por el Ministerio de Justicia para que los juzgados fueran recibiendo el trabajo y organizándolo, a la espera del levantamiento del estado de alarma. Pues bien, "en la Comunidad Autónoma del País Vasco no fue posible. La aplicación de Justicia del Gobierno Vasco Justiziasip no permite la presentación telemática de escritos iniciadores. Esta contrariedad hacía que nuestro territorio estuviera en peores condiciones que otros", critica la decana del Colegio de Abogados. El Gobierno Vasco revirtió parcialmente está situación, sustituyendo la presentación telemática por la presencial, habilitando a partir del 27 de abril un sistema de cita previa, con el consiguiente traslado al Palacio de Justicia. "Quedó confirmada la percepción que ya teníamos de la insuficiencia del sistema de videoconferencia en la Administración de Justicia, en la actividad ordinaria y fundamentalmente en la de los Juzgados de Guardia".
A diferencia de tantos otros sectores en los que ha sido posible mantener la actividad mediante el teletrabajo, "en la Administración de Justicia del País Vasco no había posibilidad de realizar ni siquiera el acto más nimio que pudiera tener un procedimiento judicial."
Los juzgados vascos van a retomar su actividad gradualmente hasta el 15 de junio cuando está previsto que vuelva al trabajo la totalidad de la plantilla. Así lo ha anunciado esta semana la Comisión de Seguimiento de la situación del COVID-19 en la Administración de Justicia vasca, reunida el miércoles.
Es necesario que la actividad judicial se retome a la mayor brevedad posible, para lo cual es fundamental que los funcionarios vuelvan a sus puestos de trabajo. Hay una previsión de reincorporación del 33% de la plantilla a partir del martes, del 66% aproximadamente desde el 24 de mayo y el 100% desde el 15 de junio. Pero, según observa Maiztegi, no será fácil. "La actividad judicial sólo se retomará razonablemente si hay medios materiales y personales, que ya eran insuficientes antes de la declaración del estado de alarma. La previsión es que al inicio de la tramitación de los procedimientos habituales, se sumen otros nuevos, propios de la situación económica y social relacionados con el estado de alarma".
El Ministerio de Justicia ha publicado varias medidas procesales y organizativas para hacer frente al COVID-19. A este respecto, el Colegio de Abogados insiste en que "no llegarán a ser tales porque no hay ni medios materiales ni personales", cuando menos en el territorio guipuzcoano. "El papel lo aguanta todo, pero cuando se legisla sin alma y sin corazón y sólo con una finalidad de estética social y encima sin contar con los que tienen que hacer efectivas las medidas, nos encontramos que éstas resultarán ineficaces y darán mayor frustración a la ciudadanía".
El Decreto prevé, por ejemplo, la celebración de actos procesales mediante sistema telemático "siempre que los Juzgados, Tribunales y Fiscalía tengan a su disposición los medios técnicos para ello". Es decir, "estamos ante una mera declaración de intenciones", censura Maiztegi.
"Podíamos haber desarrollado más actividad, pero para eso hacen falta más medios"
Decana del Colegio de Abogados
"Éramos la envidia fuera de Euskadi, pero hemos pasado de ser pioneros a estar en el furgón de cola"
Magistrado de la Audiencia de Gipuzkoa
