- La crisis sanitaria provocada por el coronavirus parece entrar en una fase de mejoría o al menos de estabilización en Euskadi, según indicó en su comparecencia de ayer Nekane Murga, consejera de Salud del Gobierno Vasco, basándose en los datos que se ofrecen a diario.

"Ayer (por el lunes), siendo uno de los días que más pruebas se hicieron en Euskadi, siete de cada diez dieron negativo. Es decir, estamos realizando un alto número de pruebas (cerca de 16.000 hasta la fecha), pero menos personas están infectadas. Esto, junto a la estabilización observada los últimos cuatro días en número de positivos, nos permite estar esperanzados en que las medidas que se adoptaron hace dos semanas están teniendo resultado", dijo Nekane Murga.

Son 263 los nuevos casos positivos en COVID-19 registrados el lunes en Euskadi (menos de la mitad que mucho días de la semana pasada), lo que eleva el número total a 6.320. En Gipuzkoa los nuevos contagiados son solo 42, que supone la mejor cifra desde el 19 de marzo y confirma la mejoría apuntada el domingo, cuando dieron positivo 54 personas. Los seis días anteriores, la cifra había rondado o superado los 100 contagiados. En el territorio son 1.113 las personas afectadas por coronavirus.

"A la vista de los datos y la secuencia de los últimos días, y teniendo en cuenta el alto número de test que estamos realizando, todo apunta a que podríamos estar en una fase de meseta", expresó la consejera de Salud, haciendo referencia a que se ha roto la tendencia al alza de aumento de casos y que se ha evitado así un pico de afectados que podría colapsar los hospitales, algo que quiere evitar a toda costa Osakidetza.

Nekane Murga, en cualquier caso, mostró su "prudencia" de cara a las próximas jornadas: "No podemos asegurar que no vaya a producirse una subida de contagios algunos días, habrá variabilidad si vamos comparando día a día, pero lo que importa es el cambio que hay en la tendencia. Podemos afirmar que se constata una mejoría".

Otro factor para el optimismo es "la situación en las UCIs": "Hay mayor estabilidad que los días previos. El lunes fue el primer día en el que hubo un mayor número de altas en la UCI de Txagorritxu (Gasteiz) que ingresos. Aunque en el conjunto de Euskadi siguen aumentando el número de camas ocupadas, es en menor medida que la subida observada en los días previos", dijo Murga, que aseguró que "el sistema sanitario vasco está en condiciones de dar respuesta a las necesidades de UCI".

Ahora son 281 las camas de Cuidados Intensivos ocupadas en Euskadi, 214 de ellas por personas contagiadas por COVID-19. "La capacidad actual es de 356 camas, de las que 281 están ocupadas, así que en este momento tenemos 75 camas con la dotación de personal y recursos necesarios que están para ocuparse si hay personas que lo necesitan", una cifra que se puede elevar, según dijo Murga: "Podríamos habilitar otras 53 camas en pocas horas si viéramos la necesidad de ellas". Parece lejano, por tanto, el escenario de 550 al que podría llegar Osakidetza en caso de necesidad, el denominado escenario 4.

El personal también ha aumentado para atender la demanda creada por la pandemia. En este sentido, la consejera de Salud destacó que "hay personal sanitario jubilado realizando apoyo sobre todo telefónico" y que se están incorporando "médicos recién licenciados": "Están trabajando ya en nuestra red sanitaria 147 y esperamos que se incorporen 24 más".

Dentro de este buen tono general, son los fallecidos, 325 en Euskadi (44 en Gipuzkoa, el territorio menos afectado), "el coste más terrible de la pandemia". "Es cierto que la cifra de fallecidos es elevada", reconoció Murga haciendo sobre todo referencia a los 133 fallecidos en Araba y 148 en Bizkaia.

El lunes en Gipuzkoa fallecieron tres personas, las tres en residencias de mayores: una en Iurreamendi de Tolosa, otra en Santa Ana de Zarautz y otra en Iturbide de Arrasate, lo que eleva la cifra a 11 en centros para personas mayores. Además, los casos positivos en residencias en el territorio son 107 -hubo 12 positivos el lunes-, de los cuales 20 han sido trasladados al centro de la Cruz Roja y siete permanecen hospitalizados.