Logroño - Ana, una niña de solo 5 años, apareció ayer muerta en una habitación de un hotel de Logroño sin signos externos de violencia, mientras su madre, de 36 años, que podría haber intentado suicidarse, se encontraba sentada en el alféizar de la ventana con algunos cortes. La Policía acudió al hotel Los Bracos después de recibir una llamada del establecimiento ya que un vecino les había alertado de que veía a una persona con intenciones suicidas en una de las ventanas del hotel.

Los agentes comprobaron que había una mujer sentada en el alféizar de la ventana y que presentaba algunos cortes, mientras que hallaron a la niña muerta en la cama. La madre, que salió a pie del hotel y con signos de agitación, fue trasladada en una ambulancia a un hospital de Logroño, indicó la Jefatura Superior de Policía de La Rioja, que señaló que la mujer no se encuentra detenida. La mujer había escrito unas cartas de despedida que fueron entregadas por un familiar a la Guardia Civil de Haro.

Una vez activado el protocolo ante este suceso, que investiga la Policía Nacional y la Científica, se busca a una de las abuelas de la niña, que se registró en el mismo hotel junto a la madre y la niña fallecida. Las tres se encontraban alojadas en la habitación 404 del citado hotel de Logroño.

Mientras, el Juzgado de Instrucción número 3 de Logroño autorizó el levantamiento del cadáver y abrió las diligencias correspondientes mientras una autopsia determinará las causas de la muerte de la pequeña.

Denuncia del padre El padre de la niña presentó el domingo por la noche una denuncia por la desaparición de la menor porque su mujer, que intentó suicidarse y de la que se encuentra en un proceso de separación, había incumplido el horario de entrega de la menor, lo que ya había ocurrido en otra ocasión.

Según fuentes de la investigación, la denuncia se presentó a última hora del domingo en el cuartel de la Guardia Civil de la ciudad riojana de Haro, situada a unos 48 kilómetros de Logroño, en la que el padre, de nacionalidad española, explicó que su mujer tenía que haberle entregado a la niña esa tarde y que no lo había hecho. - Efe/E.P.