donostia - Gipuzkoa contará en 2020 con unos presupuestos "sociales e inversores" que permitan dar un "salto cualitativo en la lucha contra las desigualdades", así como materializar los proyectos más importantes de la legislatura.

Las Juntas Generales dieron ayer luz verde, con el voto a favor de PNV y PSE, la abstención del PP y el voto en contra de EH Bildu y Elkarrekin Gipuzkoa, a los presupuestos forales, que destinarán casi uno de cada dos euros al ámbito social. Así, las cuentas contemplan un gasto de 915,2 millones de euros (un incremento de 39,7 millones con respecto al presupuesto de este año), de los que 400 euros irán a parar al Departamento de Políticas Sociales que dirige Maite Peña; una inversión de 22 millones de euros para poner en marcha los centros estratégicos que contempla la estrategia foral Etorkizuna Eraikiz; y afrontará una importante reducción de la deuda (45,6 millones). "Se trata de un presupuesto muy potente, inversor y social, reflejo de nuestra gestión política, y nuestra principal herramienta para construir esa Gipuzkoa con los menores niveles de desigualdad social, de género y lingüística posible", defendió el diputado general, Markel Olano.

A juicio del responsable del Ejecutivo foral, se trata de un "hito muy importante", ya que "permite iniciar la legislatura con ambición". En este sentido, contribuirán al descenso de las desigualdades sociales a través de la estrategia Elkar Ekin y posibilitarán la materialización de los proyectos de futuro que necesita el territorio, tales como los centros de referencia en torno al envejecimiento y la dependencia (Adinberri) o la electromovilidad (Mubil), entre otros. Y es que cabe recordar que los de 2020 serán los segundos presupuestos más altos de la historia de Gipuzkoa. Asimismo, Olano destacó la importante apuesta de su Ejecutivo en la promoción económica, ya que, a su juicio, es la "mejor fórmula para que la recaudación siga creciendo y, de este modo, contar con más herramientas para sostener el nivel de bienestar del territorio".

47 enmiendas El proyecto presupuestario definitivo incluye un total de 47 enmiendas por valor de 832.000 euros, que han sido acordadas con todos los partidos de la oposición.

Concretamente, el Gobierno foral ha acordado con el PP un total de catorce enmiendas por valor de 155.000 euros; 16 propuestas con EH Bildu (375.000 euros); y 17 con Elkarrekin Gipuzkoa, por un total de 302.000 euros. "Nuestra actitud en las negociaciones ha sido abierta y proclive al diálogo, pero respetando siempre el espíritu del proyecto que presentó la Diputación", argumentó Olano.

Sin embargo, los partidos de la oposición no se mostraron satisfechos con las cuentas aprobadas. El portavoz de EH Bildu, Juan Karlos Izagirre, lamentó que el Ejecutivo foral use el "rodillo político" para dar luz verde a unos presupuestos que, a su entender, "no son buenos para Gipuzkoa".

También las junteras de Elkarrekin Podemos, María Valiente y Arantxa González, defendieron que Gipuzkoa necesita una "alternativa", "otro modelo basado en la gente".

Finalmente, el juntero popular, Juan Carlos Cano, declaró que "en la Diputación de Gipuzkoa hay dos gobiernos, uno del PNV y otro del PSE, compitiendo en el ámbito del marketing y la propaganda, por ver quién ocupa más espacios en los medios de comunicación".

Además, lamentó que el Ejecutivo "se ha limitado a aceptarnos a cada grupo de la oposición siete enmiendas parciales para que no tengamos envidia ni nos enzarcemos los unos con los otros", porque esa es "su ambición colaborativa".