donostia. Decía Napoleón "si quieres que algo no se resuelva crea una comisión". ¿Cree que harán caso de sus indicaciones los nuevos gobernantes marianistas?

Es muy difícil por lo del consenso. Es bastante factible que los miembros de la comisión, que procedemos de áreas distintas, lleguemos a una opinión consensuada. Lo que veo complicado es que nos hagan caso y no por falta de voluntad de ejecutar lo que decidamos sino por la dificultad de consenso.

¿Por qué de entre todas las ciencias es mayor el auge de las ciencias de la salud (biomedicina) en el Estado?

Porque todos queremos vivir más años y sin enfermedad y la ciencia se alimenta con nuestros impuestos. Y ya que nosotros los pagamos queremos que se haga la ciencia que a nosotros nos gusta más.

Usted acude a conferencias/institutos para fomentar entre los adolescentes la ciencia como parte de nuestras vidas. ¿Cree que en nuestra sociedad de lo inmediato cala el mensaje del esfuerzo y del trabajo en equipo?

No. Para qué nos vamos a engañar. Lo que cala es la cultura de la satisfacción inmediata, de los deseos y de obtenerlos sin esfuerzo. Eso es lo que para la mayoría de las personas es un sueño realizable. Lo raro es que muchas personas piensan que eso se puede conseguir así y, por lo tanto, actúan para conseguirlo. Al no lograrlo llegan los desastres. ¿Para atraer a mayor número de jóvenes hacia el campo de la investigación haría falta mayor divulgación científica? ¿Conferencias, revistas, periódicos… tal vez una Internet de calidad certificada pueda ser el campo más atractivo para atraerles a la ciencia?

Lo primero es dar una buena enseñanza de las ciencias en la escuela. Hablo de divulgación y proselitismo de la ciencia. Tenemos que convencer a los niños de lo que nosotros sabemos. Que ser científicos es lo que mejor que se puede ser en este mundo; el mejor oficio del mundo. Pero como la ciencia se presenta horriblemente mal, como una colección de datos que no se sabe para qué sirve, los niños, que no son tontos, no cogen eso, optan por cosas más atractivas, como las máquinas de juegos. La ciencia de podría presentar como una actividad enormemente más atractiva que cualquier juego, pero no sé por qué no se hace.

Aunque con las expectativas actuales para un científico…

Lo que ocurre es que una vez que se inocula una persona con el virus de la ciencia ya todo le da lo mismo. Una frase que yo he oído a muchos colegas es si yo tuviera suficiente dinero haría esto exactamente igual. Si tuviera muchísimo dinero me construiría un laboratorio para mí solo. Eso es lo que haríamos todos. Esto es lo que nos gusta. A muchos científicos les he oído: hacemos lo que nos gusta y, además, nos pagan. En estas condiciones de perversión total de los valores, comprendo que la situación actual no es muy atractiva, pero a pesar de eso, yo no haría otra cosa.

Cuando escucho a un científico, por cada asunto con solución que expone plantea cien cuestiones nuevas. ¿Es eso hacer ciencia?

Sí. Eso lo da el oficio. Es precisamente lo que le ocurre al científico en su trabajo. El papel del científico es resolver enigmas, dar contestación a preguntas y, cuando resuelve por fin el enigma, se da cuenta que en el camino le han aparecido cinco enigmas nuevos cuya existencia no se sospechaba. Al final se consigue averiguar que sabe un poquito más e ignora mucho más.

Pero entonces, frente a un mundo de seguridad y certezas, esta búsqueda continua de respuestas a preguntas inacabables, ¿ya será atractivo para a los jóvenes?

Hay dos clases de personas, los que se enganchan y los que no. A los tres meses de empezar un joven en un laboratorio, si no está enganchado esto le parece aburrido, absurdo, idiota y se va. Si estamos inoculados nos quedamos como hemos hecho los demás.

¿Ya le quedará tiempo para el 'bello canto' como barítono de nivel?

Sí. Para cantar sí. El día tiene 24 horas para todo el mundo. Es cuestión de cómo te organizas. Yo soy capaz de sacar un tiempo, si no todos los días, bastantes.

Una última pregunta: un joven de 25 años, ¿encontraría hoy suficientes razones para elegir ser científico investigador en ciencia básica?

Sí. Solo hay una razón. Es la curiosidad intelectual. No hay una droga tan satisfactoria para el intelecto como esta. Si naciera cien veces, cien veces sería, sin duda, científico.