La parálisis ha tocado a su fin, y los engranajes comienzan a girar tras el relevo de varios ministros del Gobierno español y el frenazo veraniego, que dejaron en el limbo varios compromisos asumidos con el Ejecutivo vasco. Tras haber concretado ya varias reuniones, el gabinete de Pedro Sánchez ha reabierto una carpeta crucial: la nueva ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, recibirá el viernes a las 12.00 horas en su despacho en Madrid a la consejera de Autogobierno, Olatz Garamendi, para retomar la negociación de las transferencias pendientes, es decir, para profundizar en el cumplimiento íntegro del Estatuto de Gernika.

En estos momentos, hay dos cuestiones en el aire que el Gobierno vasco quiere desbloquear: plantea celebrar este mismo año otra reunión de la Comisión Mixta de Transferencias para firmar otra remesa de competencias, como prometió Miquel Iceta antes de su relevo; y también exige dar un impulso político a la transferencia íntegra del Ingreso Mínimo Vital, que tendría que haber llegado el 31 de octubre de 2020 y sigue bloqueada. No obstante, fuentes de la consejería consultadas por DEIA solamente pueden confirmar, por un lado, que Garamendi acudirá con una posición de exigencia sobre todos los traspasos (quedan 27) porque quiere que comience el cruce de papeles y, por otro lado, también estará sobre la mesa la transferencia del Ingreso Mínimo Vital, donde el ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, no da su brazo a torcer y se resiste a enviar otra oferta tras haber enviado a finales de mayo un documento inasumible tanto para la parte del PNV como la del PSE en el Gobierno vasco.

LOS TRASPASOS QUE ICETA PLANTEÓ ANTES DE IRSE

Iceta había trasladado a Garamendi su disposición a abordar las transferencias de los trenes de cercanías (el Estado solo ha transferido dos líneas y lo hizo obligado por una sentencia del Tribunal Constitucional, pero quedan otras nueve), la inmigración (ejecutar la legislación laboral en las autorizaciones de trabajo, incluida la inspección y sanción; desempeñar labores de acogimiento y atención sociosanitaria, orientación e integración), ordenación del litoral (Iceta dijo que no aparece en el Estatuto de Gernika, pero que podría buscar una fórmula porque otras comunidades que han reformado sus estatutos sí la han asumido), y también el IMV.

Los últimos traspasos se retrotraen al mes de mayo, cuando se cerró la gestión de las prisiones, el código bibliográfico ISSN, el edificio sede del Distrito Marítimo de Ondarroa y el transporte por carretera. La cita del viernes será el primer encuentro presencial con la nueva ministra, y Garamendi le concede una gran importancia para reactivar los traspasos.

Al mismo tiempo, Garamendi acaba de presentar el libro La erosión silenciosa, donde denuncia las invasiones competenciales a través de legislación básica del Estado o de la doctrina del Tribunal Constitucional. Poner fin a esta erosión es también una prioridad, y la consejera ha formalizado un conflicto positivo de competencia ante el tribunal por el decreto estatal sobre la administración digital.

EL DIÁLOGO SE REACTIVA CON BOLAÑOS

Era cuestión de horas o minutos que se cerrara esta cita, después de que, como informó este periódico, el Gobierno español haya reactivado su diálogo con el vasco por dos vías: Sánchez ha designado al ministro de Presidencia, Félix Bolaños, como coordinador de los compromisos con Euskadi en sustitución de la relevada Carmen Calvo; y, tras ese movimiento, han comenzado a sustanciarse encuentros como los que tuvieron lugar entre la consejera Artolazabal y la ministra Llop, o Jokin Bildarratz y Manuel Castells en materia de universidades.

La reunión sobre las transferencias era una de las cuestiones de mayor peso político que quedaban por concretar, y se da la circunstancia de que reactivar el calendario de los traspasos es también una de las cláusulas que ha planteado el PNV para poder abordar la negociación de los Presupuestos estatales del próximo año en un clima de confianza.

Sánchez necesita los seis votos de los jeltzales, y el PNV ya ha pedido con claridad que se reactiven los traspasos, que se cierre la transferencia del IMV y, en otro negociado que no corresponde a Isabel Rodríguez, ha exigido que se firme la licitación de las obras de soterramiento del Tren de Alta Velocidad en su entrada en Bilbao y Gasteiz. Esa última cuestión corresponde a la ministra Raquel Sánchez. Cuando se despejen estos obstáculos, el PNV entrará a negociar los Presupuestos poniendo el foco en los fondos europeos. En ese punto entra en escena el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, que ha arrancado por ahora 500 millones en tres años en las reuniones con la ministra Montero.

GARAMENDI EXIGE EL IMV ÍNTEGRO

El calendario de transferencias fue planteado por el propio Gobierno español pero acumula retrasos por las convocatorias electorales, la pandemia y, por último, la remodelación del Ejecutivo de Sánchez. Se desconoce si el calendario va a experimentar una nueva readecuación en la cita del viernes. En cualquier caso, Garamendi lo ha tratado también como algo vivo y no encorsetado para plantear, por ejemplo, que se adelanten algunas transferencias de suma importancia para su departamento, como la de inmigración, un asunto que a los socialistas vascos también les parece prioritario y que, en sentido estricto, no tendría que haberse abordado hasta el segundo bloque.

En cuanto al Ingreso Mínimo Vital, el viernes pasado Garamendi reveló a preguntas de este periódico que no ha recibido una nueva oferta del Estado, e insistió en exigir esa transferencia íntegra. El nudo está en el Ministerio de Escrivá, quien se empeña en que la Seguridad Social controle la autorización y el pago de esta ayuda. Tampoco la líder del PSE y vicelehendakari segunda, Idoia Mendia, comparte su planteamiento. Exige un traspaso íntegro sin recortes ni planteamientos sin precedentes.