- La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, tachó ayer al Tribunal de Cuentas como una “cueva de ladrones” que practica el “bullying político”, y registró una iniciativa para que suspenda su actividad o, al menos, la parte jurisdiccional. La institución que preside María José de la Fuente está en el punto de mira del soberanismo catalán por sus informes cuestionando el uso de recursos públicos para fomentar el proceso independentista de 2017 y por las fianzas que ha exigido a los cargos políticos de la Generalitat en aquella etapa.

En una rueda de prensa en el Congreso, Míriam Nogueras descalificó al Tribunal de Cuentas al considerarlo “un organismo politizado y corrupto”, que está dominado a su juicio por una “saga franquista”. “Es una cueva de ladrones que practica el bullying institucional”, dijo. Por ello, presentó una iniciativa parlamentaria para que el Congreso detenga la actividad de la institución, o al menos su función jurisdiccional que le permite actuar al estilo de un tribunal. Preguntada sobre por qué no presenta una reforma legislativa si tanto le preocupa el asunto, la diputada dijo que su formación no está para “sacar las castañas al Gobierno supuestamente progresista”, que es quien debería acometer la reforma.

El portavoz del PDeCAT en el Congreso, Ferran Bel, por su parte, llamó a los partidos independentistas a hacer frente común para negociar con el Gobierno español la financiación autonómica, y alertó de que ERC pueda optar por una posición de “perfil bajo”.