- El extesorero del PP Luis Bárcenas aseguró ayer ante el tribunal de la Audiencia Nacional que juzga la presunta caja B del PP que él personalmente entregó en mano sobres con dinero de la contabilidad B, dinero negro del partido, al expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, y a los exministros Francisco Alvarez Cascos, Javier Arenas, María Dolores de Cospedal, Jaime Mayor Oreja y Federico Trillo. En su declaración, además, reveló que un abogado próximo a la formación popular le ofreció dinero -medio millón de euros- para cambiar sus papeles donde figuraban esas anotaciones.

Ayer se reanudó la causa en la Audiencia Nacional y, con la pasmosa tranquilidad con la que ya declaró en su día en el juicio del caso Gürtel, Bárcenas reconoció ante los jueces que tanto él como su superior en ese momento, el ya fallecido Álvaro Lapuerta, eran conscientes de que actuaban “irregularmente”. Sabía que “pagar con fondos opacos era ilícito”. “Una vez dicho esto, el responsable era Álvaro Lapuerta y yo cumplía sus indicaciones”, reconoció el extesorero sin alterarse lo más mínimo.

Con una pronunciación clara, además de los ministros señalados, Bárcenas citó otros nombres de receptores de sobresueldos como el del parlamentario José Miguel Ortí y el del asesor Pedro Arriola, marido de la exministra Celia Villalobos. Además, aseguró que en la contabilidad paralela aparecen Rodrigo Rato y Angel Acebes, si bien personalmente él no les entregó dinero en mano.

“Las entregas a Rajoy y a Cospedal desde el Congreso de junio de 2008 las realizo yo siempre”, aseguró Bárcenas, que manifestó que el sistema de contabilidad en negro o caja B nació porque el partido recibía donativos, generalmente superiores al límite de gasto, y “había una serie de compromisos que había que satisfacer de forma no oficial”.

En su declaración manifestó que fue el secretario general del PP Francisco Álvarez Cascos, quien dio la “instrucción” a Álvaro Lapuerta, para que se procediese de ese modo. Un procedimiento que, según Bárcenas, continuó con el conocimiento de los siguientes secretarios generales, entre los que citó a “Arenas, Acebes o Cospedal”. Según manifestó, cuando el PP ganó las elecciones en 1996 algunos “cargos importantes” del partido como Rodrigo Rato, Mariano Rajoy, Jaime Mayor Oreja o Javier Arenas, que percibían una retribución por “gastos de representación”, entraron en el Gobierno y la Ley de Incompatibilidades les impidió que siguiesen cobrando esa cantidad. Entonces, la propuesta que trasldaron a Lapuerta, -en palabras de Bárcenas- fue “que no perciban menos dinero neto que el que venían recibiendo”, de forma que “había que complementar” su sueldo con “fondos de la contabilidad extracontable hasta llegar a esa cantidad”. “Físicamente el dinero estaba en mi despacho, dentro de una caja”, señaló. Él era quien lo metía en sobres y se lo daba a Lapuerta, que “se desplazaba al ministerio correspondiente y entregaba los sobres”.

Bárcenas aseguró también ante el juez que la última entrega se la dio él a Rajoy y a Cospedal y que procedía de un donativo de unos 50.000 euros de un empresario que buscaba saldar una deuda del PP de Pontevedra que se había cargado erróneamente al partido nacional. “Le doy los sobres y ellos sabrán lo que tienen que hacer”, afirmó.

Sobre cómo funcionaba la presunta caja B, Bárcenas detalló que alguna vez se sacó dinero de la “caja fuerte de la caja A -la legal- para hacer frente a algún pago y que esa cantidad se devolvía una vez que se recibía la donación de algún empresario. Así, confirmó alguna donación superior a 6.000 euros procedentes de empresarios para financiar irregularmente campañas electorales de formaciones regionales del partido, así como la reforma de la sede del PP en Bilbao, cuyo préstamo bancario, según señaló, se costeó con los donativos de un empresario.

En su día, cuando salieron a la luz los denominados papeles de Bárcenas, el extesorero acusó a los populares de la CAV de haber recibido un millón de euros en dinero negro de supuestas comisiones pagadas por empresarios entre 1999 y 2005. El actual presidente del PP de la CAV, Carlos Iturgaiz, que fue el líder de los populares vascos entre 1996 y 2004, desmintió lo declarado por Bárcenas. “Todas las cuentas de esos años están auditadas por el Tribunal de Cuentas y por las auditorías internas del PP a nivel nacional”, dijo entonces el ahora también portavoz parlamentario de PP+C’s en la Cámara de Gasteiz.

En su declaración, el extesorero, además, desveló un intento de chantaje para que “cambiara” lo que se ha venido en denominar papeles de Bárcenas.

Así, relató que tras darse a conocer en enero de 2013 la existencia de estos papeles, fue convocado a una reunión en el despacho del abogado Javier Iglesias, al que atribuyó haber actuado como emisario del PP. Según manifestó Bárcenas al juez, le propusieron que los rehiciese -los papeles- variando los conceptos y cantidades “de cara a hacerlos públicos y crear la duda en cuanto a cuáles eran los buenos y malos”.

A cambio le ofrecieron 500.000 euros en efectivo que aportarían empresarios para zanjar el litigio que tenia con el PP, pero él reclamó 975.000 euros porque, según ha dicho, era lo que le correspondía como indemnización.