El Pleno del Parlamento Vasco, a medio gas por el coronavirus, comenzó ayer con un minuto de silencio para homenajear a Gregorio Ordóñez, el parlamentario del PP asesinado el 23 de enero de 1995 por ETA. El homenaje tuvo lugar al inicio del pleno que debatía las enmiendas de totalidad presentadas por los cuatro grupos de la oposición a las cuentas. En el exterior de la Cámara, se colocó una fotografía de Ordóñez y se mantuvo encendido un pebetero frente a la escultura en memoria de las víctimas del terrorismo. El 18 de febrero de 2014 la Mesa del Parlamento acordó realizar todos los años actos de homenaje a los cuatro parlamentarios vascos asesinados.