- El parlamentario de EH Bildu Iker Casanova acusó ayer al Gobierno Vasco de enfocar la negociación presupuestara como un "mero trámite", en el que tratará "rápidamente de sacar de la ecuación a algunos partidos" y desconoce "si hará algún esfuerzo por integrar a alguien más", aunque teme que no. Casanova se refirió de esta manera en Radio Euskadi a la reunión que el pasado viernes mantuvo EH Bildu con el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, para abordar los presupuestos vascos, tras la cual el Ejecutivo advirtió a la coalición de que no va a haber "cambios revolucionarios" en el Presupuesto y le pedía concreción.

A juicio de Casanova, el argumentario del Gobierno estaba hecho "a priori" antes de la reunión y cree que buscaba que EH Bildu le diera "algún tipo de excusa para dar por zanjado el expediente" más que entablar "posibles vías de entendimiento" y de debate para hacer "aportaciones". Para el dirigente de EH Bildu, el presupuesto, aunque aumenta, se queda "corto" porque son unos presupuestos "ordinarios para una situación extraordinaria" tanto porque se está en una pandemia que genera nuevas necesidades, como porque se está en una etapa de transformaciones disruptivas en el ámbito económico y social. Se tratan, señaló, "de unos presupuestos ordinarios porque se ha tratado simplemente de tapar el agujero de la recaudación a través de la deuda".

El parlamentario de EH Bildu señaló que la coalición ha hecho una oferta al Gobierno y, aunque saben que tiene mayoría absoluta, cree que la "excepcionalidad" del momento lleva a reivindicar la necesidad de grandes acuerdos para el presente pero también para construir unos "mínimos de futuro". A su juicio, el Gobierno de coalición PNV-PSE está tratando de enfocar la negociación como "mero trámite" y tratará "rápidamente de sacar de la ecuación a algunos partidos" y no sabe si hará algún esfuerzo por integrar a alguien más. "Discursivamente sí, pero en la práctica nos tememos que no", añadió.

Casanova se preguntó qué se ha aprendido de esta crisis porque "ni sanidad ni educación incrementan porcentualmente su presencia" en los presupuestos, pese a demostrarse como "servicios esenciales". Asimismo, denunció que tampoco responden las cuentas a la situación "excepcional" que tienen determinados colectivos como pueden ser hosteleros o autónomos.

Por otro lado, el parlamentario de Elkarrekin Podemos-IU Iñigo Martínez repitió ayer que su grupo tiene voluntad de negociar las cuentas vascas, pero aclaró que "no van a blanquear un proyecto" en el que no puedan incidir. Martínez, que es parlamentario de Izquierda Unida, una formación que no firmó el acuerdo de Podemos con el Gobierno Vasco sobre las cuentas de 2020, dijo que afrontan, como siempre, la negociación "con responsabilidad", y trasladarán al Ejecutivo una "completa plataforma negociadora" con "voluntad de negociación".

Reconoció que las posiciones de las que parten "son muy lejanas", en primer lugar, porque la reunión con el Ejecutivo se producirá a "escasos cuatro días y medio" de que se tengan que registrar las enmiendas y eso que "parecía que eran la fuerza más preferida" para negociar. A su juicio, ello evidencia el "talante negociador" del Gobierno. Por ello, no cree que sea bueno el "punto de partida" porque vienen recibiendo "portazos" desde el inicio de la pandemia, según dijo.

"El Gobierno Vasco va a enfocar la negociación de los presupuestos como un mero trámite"

Parlamentario de EH Bildu